Sobresaltos, contenidos audiovisuales que no se sabe si son reales. Explicación de médico y estudiante de doctorado en Ciencias Cognitivas. Recomendaciones.
Entra a su cuarto, se pone la pijama, apaga la luz, cierra los ojos y de repente, cuando estaba sintiendo que ya dormía, salta ¿le ha pasado?
El médico e investigador del laboratorio de Neurofisiología de la Universidad Autónoma de Manizales y estudiante de doctorado en Ciencias Cognitivas de la UAM, Fernando García, explica la razón de estos comportamientos cuando dormimos.
Al conciliar el sueño hay un tránsito entre un ciclo de estar despiertos, conocido como vigilia, hacia un ciclo donde se duerme. En ese tránsito hay una desconexión de la actividad cortical con la actividad motora, en donde el cerebro puede interpretar de formas diferentes ese proceso.
En la desconexión se puede presentar alteraciones que necesariamente no son patológicas conocidas como alucinaciones hipnagógicas. Entre ellas, la sensación de vacio que conlleva a los conocidos sobresaltos que pueden despertar a la persona; también los contenidos visuales como imágenes o sonidos que cuestan identificar si son alteraciones de la realidad.
Fernando García explica que estos episodios ocurren en el 80% de la población, presentándose con con más frecuencia en niños. En los adultos sucede en épocas donde la persona está sometida a estrés, ansiedad o miedos especificos que hacen aumentar la frecuencia de las alucinaciones hipnagógicas.
Este tipo de sensaciones se pueden evitar con el cambio de los malos hábitos de sueño que están en aumento en la población, al igual que las patologías del sueño, que provocan el aumento de la frecuencia de enfermedades relacionadas con el sistema nervioso y la salud mental, concluye el profesional.
Ciclos del sueño
– Etapa I: se entra y se sale del sueño. En esta etapa se hacen más frecuentes episodios como despertares y sensaciones de “caída” . Los ojos se mueven lentamente y la actividad muscular se disminuye. Se percibe lo que ocurre alrededor e incluso se cree no estar dormido.
– Etapa II: el sueño se hace más profundo y el tono muscular es más reducido. El movimiento de ojos se detiene y las ondas cerebrales se vuelven más lentas.
– Etapa III: es la fase del sueño en la que realmente se descansa y en la que si se despierta se sentiría confusión. Es donde generalmente se dan trastornos de sueño como el sonambulismo, terrores nocturnos y orinar.
– Etapa IV: se está profundamente dormido y se descansa física y psíquicamente. Aunque no es la fase en la que se sueña, se encuentra con imágenes, con la diferencia de que nunca son historias.
– Etapa REM: se sueña en forma de historia. En este momento no hay acciones musculares, por eso no se puede gritar cuando se quiere en los sueños. Las ondas cerebrales son iguales a cuando una persona está despierta, por lo que, el ritmo cardíaco y la presión aumenta, al igual que el movimiento de los ojos y, a la vez, los músculos se paralizan. En este momento es cuando se sueña y si se despierta, se recordará la historia.
*Información de Instituto del Sueño
Recomendaciones
* Conservar los hábitos de sueño
* Despertarse a las mismas horas
* Disminuir la cantidad de estímulos
* Mantener una buena alimentación
* Ejercitarse
* Limitar el uso de pantallas (celulares, computadores, televisores)
* Relajarse antes de dormir
* Dormir en ambientes silenciosos y oscuros