Franquicias: Todo lo que debes saber para invertir con éxito

Hoy en día las franquicias representan una gran oportunidad de negocio, y por ende, no deberías subestimar su potencial si estás pensando invertir tu dinero con el objetivo de generar una buena fuente de ingresos con un gran retorno de inversión.

Estas relaciones contractuales entre el franquiciado y el franquiciador cobraron muchísima popularidad en la década de los 90’s, tras el éxito masivo de las grandes cadenas de comida rápida que seguramente ya conoces, tales como McDonald’s, KFC, o Burger King, por tan solo mencionar unas cuantas.

Este modelo de negocios beneficia a ambas partes a grandes rasgos, y en consecuencia, cada vez hay más interesados en desarrollar estos vínculos contractuales alrededor del mundo.

De hecho, según cifras oficiales de la Asociación Internacional de Franquicias, alrededor del 4% de todos los negocios de Estados Unidos atienden a un modelo de franquicias.
Entendiendo cómo funciona el mundo de las franquicias:


¿Has pensado alguna vez en operar una franquicia, pero no sabes a ciencia cierta qué esperar, o por dónde comenzar?

Si este es tu caso, hemos preparado una guía muy completa para orientarte en torno al mundo de las franquicias, con toda la información que necesitas.

Sin duda, es un negocio que te ofrece muchas ventajas y beneficios, pero que también tiene riesgos asociados que no puedes pasar por alto si estás verdaderamente comprometido a triunfar emprendiendo con una franquicia.

A lo largo de esta guía te explicaremos con lujo de detalles qué son las franquicias, cuáles son los pasos a seguir para comprar alguna de ellas y qué posibilidades de franquicias baratas existen actualmente en el mercado.

La idea es que comprendas muy bien cómo pueden ayudarte a alcanzar tu independencia financiera en el mediano o largo plazo, siempre y cuando te asegures de cumplir con tus deberes como franquiciado al pie de la letra.
En esta mega guía de franquicias aprenderás:

Tus inicios como franquiciado:

El punto de partida consiste en comprender perfectamente qué es una franquicia. En esencia, es un acuerdo entre dos grandes partes: el franquiciador y el franquiciado.

El primero de ellos le otorga al franquiciado los derechos de explotar su marca durante un tiempo determinado, así como todos sus elementos afines: su mercado, sistemas de producción, el know-how, etc., y a cambio, el franquiciador recibe una regalía, un canon, o un royalty, a manera de retribución.

En teoría, el franquiciador disfrutará un importe del franquiciado por haberle cedido su marca comercial; su know-how, su tasa de formación y el asesoramiento necesario para operar la franquicia según estándares que ya han demostrado un buen funcionamiento.

En términos legales, una franquicia es una relación comercial y jurídica que se establece entre el propietario de una marca comercial, y una persona interesada en utilizar dicha identificación para arrancar un negocio.

Esta relación contractual dirige la forma en que se administrará el negocio entre ambas partes, y debido a que el franquiciado tomará ventaja de un bien o servicio ya consolidado en el mercado, está obligado a cumplir con todos sus estándares de calidad.
Conceptos básicos de este modelo de negocios:


Para evitar malos entendidos, o mejor dicho, para que sepas cuáles son las obligaciones que debes cumplir como franquiciado, es imperativo que domines unos cuantos conceptos básicos de este modelo de negocios.

A continuación te explicaremos los conceptos o definiciones más importantes con la finalidad que puedas identificarlos y diferenciarlos:
Franquiciador o franquiciante:

Es quien posee todos los derechos de un nombre o de una marca comercial, y por ende, está legalmente facultado para vendérselos a un franquiciado.

Puede ser una persona física o moral, pero en cualquiera de los casos está obligada a transmitirle todos los conocimientos técnicos al franquiciado para que sea capaz de comercializar bienes o servicios, mediante métodos comerciales y administrativos uniformes o estandarizados.

En resumidas cuentas, el franquiciante es quien titula los derechos de explotación de una marca, a la par de poseer su know-how de producción y comercialización.
Franquiciado: 

Es quien invierte en una determinada franquicia, es decir, quien le compra los derechos al franquiciador para usar su nombre o marca comercial.

Prácticamente el franquiciador le cede la licencia de la franquicia al franquiciado, lo cual se traduce en que esta figura adquiere la oportunidad de dirigir un negocio en función de los mecanismos de acción que ya ha establecido el franquiciador.

Dichos lineamientos se especifican en el Manual de Operaciones de la marca, con el objetivo de que los servicios o productos ofrecidos por el franquiciado se ajusten perfectamente a los más altos estándares de calidad, o a los preceptos que ya han demostrado su eficiencia en el mercado.
Acuerdo de franquicia:

Un acuerdo de franquicia es un contrato vinculante entre las partes en el cual se estipulan todos los detalles de la franquicia. Adicionalmente, se desglosan las expectativas y responsabilidades del franquiciador, y por supuesto, del franquiciado.

Una vez que ha sido firmado el franquiciado está legalmente obligado a cumplir o respetar todas las disposiciones que allí se han especificado, de modo que debe leerse y analizarse a detalle, y preferiblemente en compañía de un abogado.

Cabe destacar que existen elementos comunes en todos los contratos de negocios, pero también hay otros inherentes a las franquicias que son únicos y exclusivos de este modelo de negocio comercial.

Este tipo de contrato juega un rol crucial al momento de convertirte en franquiciado porque determina tu relación con el franquiciador. Y no solo esto, debes tener claro que de existir desacuerdos o malos entendidos entre las partes, estas deberán resolverse según los términos del acuerdo.
Marca comercial:

La marca comercial hace relación al término, signo, nombre, o diseño de una empresa, producto o servicio. Fundamentalmente sirve para identificarlo y diferenciarlo de otros productos existentes en el mercado ofrecidos por competidores directos o indirectos.

Todas las franquicias cuentan con una marca comercial específica, ya que si un negocio no tiene una identidad definida, simplemente es como que si no existiese en el espectro comercial.

Mediante la marca tus potenciales clientes pueden identificar lo que les ofreces, pero también es válido mencionar que esta te ayuda a realzar tu publicidad y a posicionar tu franquicia en la mente del consumidor de manera eficaz.

Y no solo eso, la marca comercial también es muy poderosa para fidelizar a tus clientes, lo cual implica que estarán dispuestos a consumir los productos o servicios que les ofreces ya que han tenido una experiencia positiva y satisfactoria en tu franquicia.
Know-how:

Este término anglosajón hace referencia al “saber hacer” de una empresa, o en este caso, de una franquicia. En líneas generales engloba todos los conocimientos que permiten que una empresa pueda ofrecer sus productos o servicios con un valor añadido.

El know-how es como un activo intangible que puede extenderse tanto al área estratégica, como técnica u operativa, y se caracteriza por agrupar todos y cada uno de los conocimientos inherentes a la franquicia que le han permitido convertirse en un negocio rentable.

Algunos expertos en la materia también consideran que este se va configurando gracias a una serie de experiencias exitosas que terminan por convertirse en el “saber hacer” de la empresa.
Cómo valorar el know how de una empresa:

¿Te preguntas si puede medirse? Probablemente infieras que no se puede, puesto que acabamos de decirte que se trata de un activo intangible, pero lo cierto es que sí es cuantificable económicamente.

Esto se debe a que el know-how incide significativamente en la posición que ocupa la empresa respecto a sus competidores principales, lo cual deriva en una clara ventaja competitiva capaz de cuantificarse.
Trade dress:

Su traducción literal es “vestido comercial” y representa la imagen de la franquicia, la cual está integrada por una cierta combinación de colores, métodos operativos, comerciales y signos distintivos.
Regalía:

Tras firmar un acuerdo de franquicia, el franquiciado queda obligado legalmente a pagarle una regalía al franquiciador por haberle concedido el derecho a usar su marca, así como por haberle transferido toda la asistencia técnica y los conocimientos necesarios para operar su negocio con diligencia.
Cómo funciona una franquicia:


Como ya conoces qué es una franquicia, además de estar al tanto de los principales términos asociados a este modelo de negocios, es completamente pertinente que te expliquemos en qué consiste su funcionamiento.

Técnicamente, la franquicia te permite operar un negocio que ya se ha consolidado con éxito en el mercado.

El proceso inicia cuando tú, como franquiciado, le pagas una tarifa al franquiciador para que te permita usar su nombre, o marca comercial, durante un período de tiempo determinado.

Por su parte, el franquiciador no presenta objeciones ni reticencias para ayudarte a definir la ubicación de las franquicias, y además está dispuesto a darte un entrenamiento inicial, así como a facilitarte el Manual de Operaciones de la empresa para que todo marche satisfactoriamente.

Algunas de las acciones más comunes que lleva a cabo el franquiciador para prestarte todo su apoyo son: proveerte una página web o un número telefónico gratuito para estar constantemente comunicados, enviarte boletines informativos e instructivos periódicamente, e inclusive, dictarte talleres y seminarios cada cierto tiempo.
¿Qué implica iniciar una franquicia?:

Según la Comisión Federal de Comercio de los Estados Unidos, (FTC), por sus siglas en inglés, las personas interesadas en comprar una franquicia deben estar al tanto de todo lo que conlleva esta oportunidad de negocio.

En tal sentido, en su sitio web oficial resalta que al convertirte en franquiciado te comprometes a respetar los costos definidos, los controles de los franquiciadores y las obligaciones contractuales.

Y debido a que estos factores son tan importantes en este tipo de oportunidades de negocio, te los explicaremos al detalle en esta sección:
Costos asociados a una franquicia:
– Cuota inicial:

Se trata de una contraprestación que deberás pagarle al franquiciador para adquirir el derecho a usar su marca, y para recibir sus conocimientos, conocer su experiencia en el negocio y obtener una asistencia técnica inicial.

De acuerdo a las apreciaciones de la FTC, dicha cuota puede oscilar entre decenas de miles de dólares, o varios cientos de miles de dólares, dependiendo del tipo de franquicia. 

Otros gastos significativos que deberás asumir al iniciar el negocio están relacionados con el alquiler, la construcción, o el equipamiento de la franquicia, y también con la compra del inventario inicial.

Por otra parte, deberás asumir el pago de las licencias de operación de la franquicia, los gastos del seguro, y probablemente hasta le pagarás al franquiciador una tarifa por concepto de “gran apertura”, ya que este se dedicará a promocionar la nueva tienda masivamente.
– Pagos continuos de regalías:

Las regalías son los pagos que deberás hacerle al franquiciador por cederte los derechos a usar su marca comercial para iniciar tu propio negocio.

Suelen fijarse en función del porcentaje de los ingresos brutos semanales o mensuales, y en la mayoría de los casos, deberás asumirlas durante toda la relación contractual estipulada en el Acuerdo de Franquicia.

Estas regalías te autorizan a usar el nombre de la marca. Debes saber que deberás pagarlas incluso si estás perdiendo dinero, o si el franquiciador no te proporciona los servicios prometidos.

De hecho, las regalías siguen estando operativas, o gozando de validez, en aquellos casos en los que el franquiciador rescinde de su franquicia de manera anticipada.
– Tarifas publicitarias:

El franquiciador asume el pago de una parte de las tarifas de publicidad para promocionar la nueva franquicia a nivel nacional.
Controles de los franquiciadores:

Estos controles son útiles, importantes y necesarios para garantizar que la franquicia cumpla con los estándares de calidad que mantengan su buen posicionamiento en el mercado.

En consecuencia, los franquiciadores realizan controles periódicos para determinar la forma en la que el franquiciado dirige la compañía.

Sin embargo, estos pueden restringir tu criterio de negocios ¿Te gustaría saber cuáles son los más comunes? A continuación te los presentamos a detalle:
– Aprobación del sitio:

Es muy frecuente que los franquiciadores se reserven el derecho de aprobación de ciertos sitios o locaciones para la apertura de nuevos puntos de venta.

Esto significa que el franquiciado pudiese proponer uno que no sea de su agrado, inclusive tras haber realizado importantes estudios sobre la rentabilidad del lugar.
– Estándares de diseño:

El franquiciador tiene la potestad de imponer ciertos estándares de diseño de la franquicia para que esta tenga una personalidad y una apariencia uniforme con el resto de las tiendas afines a la marca comercial.

Por ejemplo, todos los franquiciados de McDonald’s deben respetar los estándares de diseño de esta marca como el isotipo (su arco dorado más icónico o representativo), sus colores, sus mostradores y sus empaques, para que la propuesta pueda ser aceptada por el franquiciador sin inconvenientes.
– Restricciones de bienes y servicios:

Pese a que tu compras una licencia para usar una determinada marca comercial, no tienes la libertad de hacer modificaciones a tu antojo en aspectos claves del negocio, como su menú, uniformes, o sus productos y servicios.

Es decir, si te interesa comprar una franquicia de Starbucks deberás apegarte al Manual de Operaciones del franquiciador y ofrecerle a tus consumidores los mismos productos que ya han sido lanzados al mercado: sus cafés, galletas, tazas, termos, etc.

De modo que no estás autorizado a vender nuevos tipos de café o de bollería en tu nueva franquicia de Starbucks, puesto que estos no forman parte de la propuesta de valor central de la marca.
– Restricciones del modelo operativo:

Los franquiciadores podrían obligarte a operar de una manera determinada al momento de comprar la franquicia.

En tal sentido, podrían determinar el horario de trabajo, cómo lucirá el uniforme de los empleados, o el estilo de los anuncios y publicidades.

Adicionalmente, podrían estipular que te apegues a ciertos procedimientos contables que a ellos ya le han funcionado, o que le resultan más beneficiosos o rentables, así que tampoco podrías tener muchas libertades en este aspecto.
– Restricciones del área de ventas:

Puede que algunos franquiciadores prefieran limitar su negocio a ciertas locaciones o extensiones territoriales específicas para realizar sus ventas.

En otras palabras, podrían tener la autoridad de impedir que otros franquiciados inicien franquicias en sus “territorios exclusivos”.

Por ejemplo, un franquiciador de Burger King que posea exclusividad en un área determinada, podría evitar que otros franquiciados operen como competidores directos o indirectos de otras franquicias en el mismo lugar.
Obligaciones contractuales:

En este punto debes inferir que tanto el franquiciador como el franquiciado deben apegarse a las obligaciones contractuales estipuladas en el Acuerdo de Franquicia, tales como las que te explicaremos en la próximo sección:
– Terminaciones:

El franquiciador tiene la potestad de finalizar el contrato de la franquicia por múltiples razones, siendo el incumplimiento del pago de las regalías por parte del franquiciado, o el irrespeto a las restricciones de ventas, unas de las más relevantes.

No obstante, el franquiciador puede ofrecerle ciertas flexibilidades al franquiciado al momento de incumplir con sus obligaciones, como por ejemplo, permitirle ponerse al día en los pagos sin rescindir del contrato.

Pero en líneas generales, el franquiciador podría dar por terminada la relación contractual por fallas explícitas, y esto ocasionaría que el franquiciado termine perdiendo toda su inversión.
– Renovaciones:

Renovar un contrato de franquicia no es un proceso automático, y esto significa que cuando finalice el plazo acordado entre las partes, el franquiciador puede oponerse a renovarlo, o inclusive, proponer una actualización de este documento para modificar sus términos o condicionantes.

Algunos de los cambios que podría contemplar tras la finalización del contrato original, y en pro de una futura renovación, podrían ser el incremento de los pagos de las regalías, la imposición de nuevas normas de diseño, o mayores restricciones en las ventas.
Pasos para montar una franquicia:


Una vez tienes claro los conceptos, reglamentos y términos, te explicaremos cuáles son los pasos a seguir para montar una franquicia, o para iniciar un negocio exitoso bajo este modelo:
1. Estudiar la demanda:

Comprar una franquicia implica asumir un riesgo, y por ende, debes asegurarte de que tu inversión te genere un buen retorno, o de que tu margen de ganancias sea el esperado.

Por eso el primer paso consiste en evaluar la demanda del producto o servicio que esperas ofrecerle a los consumidores mediante tus franquicias.

Algunas de las preguntas que podrías hacerte para determinar cuán demandante podría ser tu negocio, abarcan los siguientes aspectos:

– ¿Existen personas interesadas en comprar tus productos, o contratar tus servicios, al menos en tu entorno inmediato?

– ¿Se trata de un producto o servicio estacional que podría pasar de moda rápidamente?

– ¿La marca comercial de la franquicia que operarás es realmente capaz de atraer a clientes potenciales sin problemas?

– ¿De verdad existe un mercado potencial para tu producto o servicio?
2. Analizar la competencia:

Una vez que has evaluado la demanda es necesario que determines el nivel de competencia de la franquicia: ¿es local, regional o nacional?

Por otra parte, es completamente válido que respondas las siguientes interrogantes para establecer el grado de competencia al que tendrás que enfrentarte como franquiciado.


– ¿Cuántos puntos de venta posee la franquicia en el área en donde esperas iniciar el nuevo negocio?

– ¿La franquicia tiene productos o servicios que se venden por Internet, se consiguen fácilmente en línea, o incluso mediante un catálogo?

– ¿Cuántas empresas o franquicias hay en el mercado ofreciendo productos o servicios similares a los tuyos, o hasta con un precio parecido?

– ¿Dichas franquicias están bien posicionadas en el mercado?, es decir, ¿las personas las conocen con facilidad y utilizan sus productos o servicios con frecuencia?
3. Determinar el nivel de operatividad:

Aunque no lo creas, hay ocasiones en los que el sistema de las franquicias presenta fallas, o en los que se generan inconvenientes mayores que podrían perjudicarte severamente como franquiciado.

En consecuencia, es imperativo que determines tu capacidad para operar el negocio, y que definas un plan de negocios para superar algunos contratiempos importantes, como por ejemplo, el cierre de la tienda por parte del franquiciador.
4. Corroborar el reconocimiento de la marca comercial:

Al comprar una franquicia adquieres el derecho a usar el nombre, o la marca comercial del franquiciador, y si esta goza de mucho reconocimiento en el mercado, pues habrán más probabilidades de atraer a un gran número de clientes.

En cambio, si la marca no posee reputación te verás forzado a generar la demanda prácticamente desde cero, todo con la finalidad de que tus productos o servicios les resulten valiosos o necesarios a tu público. Entre mayor reconocimiento tenga la marca, más fácil será para ti.
5. Verificar las quejas de las franquicias:

Puede ser que algunos consumidores o franquiciados hayan presentado quejas en contra de la franquicia, o inclusive, del franquiciador, ante los entes competentes, como las agencias locales de protección al consumidor.

Esta verificación te servirá para determinar riesgos inminentes y para evaluar qué tan factible o rentable sería dar el siguiente paso en el proceso de compra, e incluso, para definir qué negocio montar.
6. Evaluar la oferta del franquiciador:

Tanto el franquiciado como el franquiciador deberán beneficiarse de un Acuerdo de Franquicia, y por lo tanto, deberán asegurarse de que la oferta sea verdaderamente atractiva para ambos.

Lo ideal es que el franquiciador te ofrezca sus servicios de entrenamiento y soporte, y no solo eso, también es vital que estas capacitaciones estén a la altura de las que pudiesen ofrecerte otros franquiciadores que hacen vida en el mismo tipo de negocio, o en el mismo campo.
7. Conocer la experiencia del franquiciador:

¿Cuánto tiempo lleva el franquiciador administrando su sistema de franquicias?, ¿ha tenido éxito realizando este trabajo?, ¿te ofrece garantías de que su marca comercial te generará beneficios tangibles o reales?

Si determinas que no está capacitado para dirigir el negocio satisfactoriamente lo mejor es que evites llegar a un acuerdo con él, puesto que podrías verte seriamente afectado durante el proceso, o lo que es peor, podrías perder tu inversión y jamás alcanzar el retorno a la inversión esperado.
8. Evaluar el crecimiento del negocio:

Si el sistema de franquicias en el que estás interesado posee una buena proyección de crecimiento, o si la marca comercial está muy bien posicionada en el mercado, es muy probable que puedas atraer consumidores potenciales con facilidad.

Sin embargo, es importante que sepas que el mero indicador de crecimiento no es sinónimo de que los franquiciados lleguen a convertirse en emprendedores exitosos, y por lo tanto, debes investigar cuáles son los recursos y activos financieros que poseen con el fin de detectar si estos le permitirán ayudarte con eficacia.
9. Definir el tipo de franquicia:

¿Será una franquicia individual, industrial, comercial, de producción, de servicios o mixta? Cada una de ellas cuenta con características definidas y su elección dependerá de los requerimientos o necesidades que tengas como franquiciado.
10. Conseguir el financiamiento:

Al inicio de esta nota te dijimos que comprar una franquicia puede costarte miles de dólares, así que es muy probable que necesites conseguir un financiamiento para poder operar tu nuevo negocio.

Aquí te dejamos una guía para conseguir préstamos para negocios.
Principales tipos de franquicias:


Actualmente existe una gran multiplicidad de franquicias, a continuación te describiremos las más populares del mercado:
Franquicia comercial:

Este es uno de los modelos clásicos de franquicias y consiste en que el franquiciador le ofrezca al franquiciado todos los elementos necesarios para que venda sus productos o servicios exitosamente, y así pueda aumentar su actividad comercial a mediano o largo plazo.
Franquicia de producción:

En este caso el franquiciador es el encargado de producir los productos que venderá el franquiciado, es decir, que su producción siempre estará cubierta.
Franquicia de distribución:

Se le conoce mayormente como franquicia de producto. Se presenta cuando el franquiciador se comporta como una central de compras y termina adquiriendo los productos del negocio para luego repartirlos entre los franquiciados.

Sin embargo, el franquiciado tiene la responsabilidad de distribuírselos al consumidor final mediante su propia red de negocio, de modo que este modelo implica un gran trabajo de ambas partes.
Franquicia mixta:

Este modelo combina la franquicia de producto con la de servicio, así que es una de las más populares y atractivas del mercado en la actualidad.
Franquicia múltiple:

Cuando un franquiciado posee varias franquicias de la misma marca comercial se dice que posee una franquicia múltiple.
Franquicia de participación accionarial:

Mediante este modelo una de las partes tiene participación en el accionariado de la otra. En otras palabras, el franquiciador tiene participaciones en el negocio del franquiciante.
Franquicia de tienda online:

En esencia, esta modalidad de negocio está basada en el comercio electrónico, lo cual significa que los franquiciados no necesitarán instalar una tienda, o contar con una ubicación física, para ofrecer sus productos o servicios, ya que esto lo hacen por medio de una tienda online.
Franquicia maestra o principal:

Se da cuando el franquiciador permite que el franquiciado se vincule con otros empresarios interesados en desarrollar la misma actividad comercial en una región determinada.

Básicamente se maneja la figura de las “sub-franquicias” con otros franquiciados individuales mediante esta relación contractual.
Franquicias populares según sus montos de inversión:

Crédito: Shutterstock

A continuación te diremos cuáles son las franquicias rentables y más famosas de América Latina y España, e inclusive las clasificaremos según sus montos de inversión:
Franquicias entre $1 y $1.000 dólares:
Coin City:

Esta es una de las franquicias mexicanas con mayor auge en la actualidad ya que implica la venta y renta de máquinas expendedoras.

Inversión inicial: superior a los $300 dólares.
Retorno de la Inversión: está proyectado para 1 año.
Lugar: México y otros países de Latinoamérica.
Alpha Green Solutions:

Es una de las franquicias baratas más conocidas en México ya que presta el servicio de lavado de autos sin agua.

Inversión inicial: un poco mayor a $500 dólares
Retorno de la inversión: entre 1 o 2 meses
Lugar: México

Franquicias entre $1.000 y $10.000 dólares:
MiAppMovil:

Empresa dedicada al diseño web y aplicaciones para uso comercial, específicamente para empresas o negocios locales o nacionales.

Inversión inicial: 1.860 dólares.
Retorno de la Inversión: 1 o 2 meses.
Lugar: España
Devuelving:

Devuelving es una franquicia online que te permite iniciar tu propio negocio ya que te ofrece más de 50.000 artículos de consumo masivo vinculados a grandes marcas.

Además, los franquiciadores se aseguran de que sus precios sean realmente atractivos e interesantes para el consumidor final.

Este es uno de esos negocios para ganar dinero desde casa que no puedes pasar por alto si te interesa convertirte en tu propio jefe, o fijar tus propias reglas de trabajo.

Inversión inicial: 3.200 dólares
Retorno de la inversión: entre 9 y 12 meses
Lugar: Franquicia en línea
Franquicias desde $10.000 dólares en adelante:
The Coffee Store:

Esta boutique de café ofrece esta bebida en varias presentaciones: desde las más clásicas hasta las descafeinadas o saborizadas con extractos naturales.

Aunque aquí también se venden dulces como galletas, alfajores, brownies, o platos salados como pasteles y sándwiches.

Inversión inicial: 10.000 dólares
Retorno de la inversión: entre 22 y 28 meses aproximadamente.
Lugar: Argentina, Chile y Estados Unidos.
Curves:

Este club de gimnasios para mujeres es uno de los más exclusivos de Colombia y otras locaciones extranjeras. Está basado en el método Curves que les permitirá a las mujeres modernas y ocupadas conseguir el cuerpo que desean de manera divertida y poco rutinaria.

Inversión total: 60.000 dólares
Retorno de la Inversión: mayor a 30 meses
Lugar: Colombia y otros países latinoamericanos.
La Jabonería Galesa:

Es una franquicia dedicada a la venta de productos completamente naturales y de altísima calidad. Estos poseen propiedades terapéuticas gracias a la utilización de hierbas, plantas y frutas que le aportan belleza y salud a la piel.

Inversión total: 42.800 dólares
Retorno de la Inversión: varía en función de la ubicación de la franquicia.
Lugar: España, México, Colombia, Guatemala, Perú y otros países de América Latina.

Sin duda, analizar este tipo de franquicias te ayudará a definir si te interesa realizar inversiones a corto plazo, ganar dinero por Internet, o iniciar un negocio en otra área que te ofrezca un mayor margen de ganancias.
Conoce a los franquicias más exitosos:

McDonald’s:

Esta compañía de comida rápida sigue siendo reconocida como la más importante del mundo según la prestigiosa revista Entrepreneur, y todo gracias a su exclusivo modelo de negocios.

En su página oficial estipulan que más del 90% de sus restaurantes mundiales han sido comprados y operados por franquiciados independientes.

También indican que la inversión inicial es de 500.000 dólares y destacan que este dinero debe formar parte del capital líquido del franquiciado.

McDonald’s tiene presencia en más de 100 países y hasta la fecha cuenta con unos 35.000 restaurantes a escala global.

Si quieres conocer un poco más de esta historia, aquí tienes las lecciones Hambre de Poder, la película donde cuentan la historia de Ray Kroc.
Subway:

Esta es otra gran red mundial de franquicias que se especializa en la preparación de sándwiches frescos, al instante y al gusto de cada cliente.

En su sitio oficial estipulan que un franquiciado debe realizar una inversión total de unos 92.000 dólares para operar este negocio, mientras que su tarifa inicial puede oscilar entre los 10.000 y los 15.000 dependiendo del país en donde se encuentre.
Starbucks:

Starbucks es la compañía de café más grande del mundo, tanto así que cuenta con más de 24.000 locales en 70 países. Se caracteriza por vender café, bebidas calientes, café en granos, bocadillos, así como merchandising como termos y tazas.

La inversión inicial puede ser de 600.000 dólares, y el franquiciador puede ofrecerte un contrato de tipo comercial e industrial válido por 10 años si estás interesado en comprar la licencia de uso de esta marca comercial.

Para conocer un poco más de Starbucks y otras grandes marcas, aquí te dejamos algunas historias de empresas exitosas para que te inspires.
Burger King:

Representa otra de las franquicias de comida rápida más exitosas del mundo. Sirve hamburguesas a la parrilla, papas fritas y refrescos a un precio asequible desde hace 60 años y en la actualidad tiene presencia en más de 60 países.

Iniciar una franquicia de Burger King puede requerir una inversión inicial de 665.000 dólares, el royalty generalmente es del 5% y el contrato puede tener una vigencia de hasta 20 años -al menos en la mayoría de las locaciones de España-.
KFC:

KFC es la cadena de restaurantes de pollo más popular del mundo y ha estado vigente en el mercado desde la década de los 50’s. Las cifras oficiales develan que tiene 40.000 restaurantes en los Estados Unidos y otros países.

Por lo general, el franquiciado debe contar con 750.000 dólares en activos líquidos para poder operar una franquicia de KFC, mientras que las regalías son del 5% de los ingresos brutos.
Dunkin Donuts:

Esta franquicia de donas ha estado vigente en Estados Unidos y en otros países latinoamericanos como Chile o Perú desde hace muchos años. De hecho, en el 2018 ocupó el tercer lugar del ranking Franchise 500 como mejor franquicia.

Para iniciar este negocio requieres una inversión inicial mínima de 220.000 dólares, y el pago de regalías al franquiciador es del 5.9% de las ganancias. Además, entre el 2 y el 6% de tus ganancias deberán destinarse a publicidad.
Ventajas de comprar una franquicia:

Las franquicias poseen múltiples ventajas asociadas, de modo que representan negocios rentables y atractivos para un gran número de franquiciados a escala mundial, como por ejemplo:

– El franquiciado no comienza a operar el negocio desde cero, es decir, no compra una franquicia nueva sino una que ya está posicionada y consolidada en el mercado.

– Los riesgos de cierre son mucho menores al iniciar un negocio que goza de buena reputación.

– El franquiciador le presta un gran apoyo al franquiciado tras comprar la licencia de uso de su marca comercial, en materia de asistencia técnica, capacitación, transferencia del know-how, entre otros aspectos.

– El riesgo comercial y financiero se reduce significativamente con este modelo de negocios.

– Las franquicias ofrecen una gran rapidez de crecimiento.
Riesgos de iniciar una franquicia:

Al igual que existen ciertas ventajas de invertir tu dinero en un franquicia, también existen riesgos asociadas con este tipo de negocios. A continuación te los mencionamos:

– Los franquiciadores podrían obligarte a vender bienes o servicios a precios de descuento, lo cual podría afectar tus ganancias.

– Un franquiciador puede negarse a renovarle el contrato al franquiciado, o proponer que se le realicen cambios al contrato inicial que pueden derivar en costos más elevados, ganancias reducidas, o en un incremento de sus competidores principales.

– La relación existente entre las partes no es del todo jerárquica, y por ende, alguna de ellas podría sentir un poco de recelo en torno a la toma de decisiones del negocio.

– El franquiciado no es el dueño de la marca: esta solo le pertenece al franquiciador, y por ende, es él quien fija las directrices del negocio en el Manual de Operaciones.

– Muchas veces el éxito de una nueva franquicia depende del éxito que tenga el franquiciador, o del que posea el resto de las franquicias pertenecientes a la red de la marca.
Operar una franquicia con éxito:

Indudablemente las franquicias representan una gran oportunidad de negocio, sobre todo porque no estás forzado a iniciar una actividad comercial desde cero.

Esto significa que tus consumidores potenciales se sentirán a gusto al consumir los productos o servicios que les ofrezcas en tu nuevo punto de venta, y esto no es más que un preludio al éxito como franquiciado.
Julio Cesar Moreno Duque

soy lector, escritor, analista, evaluador y mucho mas. todo con el fin de aprender, conocer para poder aplicar a mi vida personal, familiar y ayudarle a las personas que de una u otra forma se acercan a mi.

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