La
mayoría de nosotros nunca tendremos que pisar un prisión, al
menos eso espero
Sin embargo, prácticamente TODOS pasaremos parte de nuestra vida (para
algunos será la vida entera) encerrados en otro tipo de cárcel; la de
nuestras propias limitaciones.
Algunas
de estas limitaciones son muy reales, pero la inmensa mayoría son
percepciones fabricadas por nuestro subconsciente a base de mucha, mucha
repetición.
Cada semana recibo
decenas de mensajes privados de personas que están intentando construir un
negocio en Internet... Hasta aquí todo normal, ¿verdad?
Lo que ya no es tan normal es que buena parte de estos mensajes empiezan
con una limitación completamente subjetiva o imaginaria.
¡Es
increíble! No falla, siguen el mismo patrón
"No lo
entiendo, no tengo tiempo, no sé por dónde empezar, creo que yo no
sirvo para esto, es que tengo mucho trabajo, es que me canso, nunca lo voy
a conseguir..."
Quizás
tú también has pensado así alguna vez.
Pues
he descubierto que por cada limitación, obstáculo, discapacidad y tragedia
personal existen DOS historias: la primera es una historia de resignación y
aceptación, pero la segunda es una increíble historia de superación.
Los
protagonistas de la primera versión malviven atrapados por sus barreras
ficticias, pero los segundos finalmente rompen sus cadenas y
construyen el destino que desean.
¿De qué lado vas a
estar tú,
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