Para los humanos no es nada fácil pasar
por esa tortura de la primera cita. La necesidad constante de encontrar el amor
de la vida nos lleva a pasar una y otra vez por este suplicio. Pero no se
preocupen porque en este artículo me atrevo a darles los 11 consejos
cangrejianos para no fracasar en la primera cita.
1. Saque una buena pinta, pero no se
sobreactúe
Llevar la mejor pinta que tiene a la
primera cita es mostrar todo lo que puede dar desde un principio. La idea es
mostrarse lo más natural posible, así que es mejor dejar algo para sorprender
posteriormente. No se lleve colores demasiado llamativos, ni muy mostrón ó
mostrona, a nadie le gusta que su próxima pareja ande exhibiendo por ahí todo lo
que le dio mi Dios.
2. Escoja el lugar
correcto
No vaya a meter a su cita a un antro, más
bien métase la mano al dril y saque al menos para ir a un sitio que sea decente.
La tienda ó la cigarrería de la esquina no es el mejor lugar para una primera
cita, la panadería tampoco. Llévela a un restaurante, no tiene que ser el más
caro, pero que sea limpio al menos. No recomiendo un bar para la primera cita
porque el trago puede ponerlo muy sincero ó muy sensible, y eso no es
conveniente.
3. Huela bien ó no huela a
nada
Nada peor que alguien llegue a una cita
oliendo mal. Lleve una buena dosis de chicles y asegúrese de haber usado una
buena cantidad de desodorante, pero no tanto así como para que se confunda con
su perfume. Yo diría que en la primera cita siempre se debe usar la loción ó
perfume preferido, porque en el olor está gran parte de la afinidad que se
tenga, y su olor le demostrará muchas cosas a la otra persona que tal vez no
pueda percibir con su imagen ó sus palabras.
4. Apague el celular
Qué mamera alguien que en la primera cita
ande más pendiente de la Blackberry ó el iPhone que de la otra persona. ¡Hey! Si
es la primera cita con la persona que le gusta ¿no cree que también merezca toda
su atención? Suelte esa vaina y mejor dedíquese a investigar si la otra persona
es ó no es la indicada para usted.
5. Enfocarse en sí mismo es la
guillotina
Las personas egocéntricas pocas veces ó tal
vez nunca tienen éxito en las primeras citas, nada más cansón que sentarse uno a
hablar con alguien que su único tema sea de sí mismo. Si a usted le interesa la
otra persona de verdad, al menos interésese por investigar un poco acerca de
ella, pero si se va a enfocar en usted mismo, mejor absténgase de seguir
intentando buscar su media naranja porque nunca la va a encontrar.
6. No chicanee ni se haga el
sobrado
No hay peor ridículo que el que hace una
persona que intenta conquistar con mentiras ó agrandando lo que tiene ó lo que
es. Uno siempre se da cuenta cuando la otra persona anda hablando de más de sus
pertenencias, sus viajes, su inteligencia ó sus apellidos rimbombantes, y aunque
toda esta lora que usted anda dando sea cierta, créame que a la otra persona le
interesa tres pesos tanta cháchara. Recuerde: el que mucho habla, poco
hace.
7. Jamás hable de su ex
Cuando el cuento del ex sale a relucir en
la conversación uno como que frunce el ceño y voltea a mirar para otro lado
pensando "¡Ahora me voy a dar cuenta por qué éste(a) anda solterón(na)!". Si
está intentando comenzar algo ¿para qué quiere contar sus fracasos en las
anteriores relaciones? Eso no se hace. ¿Para qué quiere poner de preaviso de sus
defectos ó sus infortunios a su nuevo prospecto? Muévase con
inteligencia.
8. No muestre la gana
Cuando usted se muestra ansioso durante la
cita, esa ansiedad se puede traducir en necesidad de afecto, y eso es lo peor.
Cuando una persona muestra ansiedad por estar en una relación ó demuestra
demasiado que le gusta la otra persona eso le quita la magia a la situación.
Recuerde: lo difícil enamora y lo fácil se olvida fácil.
9. A la hora de pagar la
cuenta
Llega la hora de pagar la cuenta y usted se
pregunta "¿Y ahora qué hago?", pues yo le tengo la respuesta, soy de los que
piensa que el hombre siempre debe pagar la cuenta ó al menos en la primera cita,
díganme machista, pero es mi forma de pensar. Recuerden que la figura del hombre
es ser el 'Proveedor', y aunque estemos ya muy civilizados y todo, a las mujeres
les gustan esos detalles. Los tacaños tienen poca probabilidad de éxito en
cualquier relación.
10. ¡No se acuesten en la primera
cita!
Ahora no vayan a decir "¡tan
mojigato!", esperen. Tener sexo en la primera cita acaba con mucha de la magia
que hubieran podido desarrollar en citas posteriores. Si se dan el tiempo de
conocerse un poco mejor y que los unan más cosas, el momento en el que llegue el
sexo será mucho más excitante. En cambio si se "comen los dulces de un sopetón"
lo que termina ocurriendo es que tal vez el sexo no sea tan mágico y terminen
por no quererse ver más. El sexo en la primera cita puede funcionar, pero si
previamente se conocen bien y se gustan mucho, en caso contrario puede ser un
error, ó quién sabe, también pueden quedar más enamorados que nunca. Mejor
dicho, como sé que a este punto no le van a hacer mucho caso porque la calentura
le puede a la razón, mejor, hagan lo que quieran.
11. Nunca espere la llamada al siguiente
día
De seguro todos en algún momento hemos
estado esperando esa llamada después de la primera cita, ¡Pfff! ¿Esperar?
Estamos en pleno siglo XXI, ahora nadie espera nada, el que piensa pierde, y en
cuestiones del amor no es diferente. Llame usted, sea hombre ó mujer, ¡no
espere! Lo peor que le puede decir es que le saque una excusa para no salir, y
si le saca dos excusas no vuelva a llamar porque no hay caso. En cambio si
acepta que se vuelvan a ver sin excusa alguna, ¡Felicitaciones!, su primera cita
fue un éxito.
Moraleja: la primera cita apesta, pero es un mal necesario para poder
encontrar esa media naranja que le hace falta.