Según el informe Health on Demand 2023 de Mercer Marsh en Latinoamérica, los problemas de salud mental dificultan la productividad.
Para los expertos hay muchas oportunidades para generar bienestar laboral.
La retención del talento es uno de los factores que muchas compañías intentan fortalecer y, según un informe publicado por la consultora en salud Mercer Marsh, el estrés laboral es uno de los elementos que más motiva a los empleados a cambiar de trabajo.
Así, encontraron que de los 4.000 encuestados en América Latina y el Caribe, el 48% de los trabajadores informó sentirse estresado en el día a día. Es decir, 4 de cada 10 colaboradores.
Frente a los factores de riesgo, las presiones laborales ocupan un 54%; el liderazgo deficiente, un 39% y las culturas tóxicas, un 37%. Además, el 55% de los empleados indicó que el año anterior trabajó sin sentirse bien mentalmente y un 61% lo hizo sin sentirse bien físicamente.
Los investigadores afirman que esto “representa un riesgo para las organizaciones, que se puede materializar en ausentismo, rotación, disminución de la productividad y de la rentabilidad”.
En el caso de Colombia, donde participaron más de 1.000 trabajadores, el 65% consideró que su empleador se preocupa por su salud y un 62% de los empleados colombianos manifestó haber trabajado, aunque no se sintiese bien a nivel físico o emocional.
Burnout
Según Ariel Almazán, líder de salud de Mercer Marsh, la dificultad en la retención está asociada, como también se evidenció en los resultados de la encuesta, “a los diseños en las jornadas de trabajo, las cargas laborales y las condiciones del empleo, así como con la satisfacción laboral”.
Además, como afirma Carolina Botero, profesora Psicología, “una situación de estrés laboral crónico puede desencadenar burnout o desgaste profesional”.
Y Almazán agrega que “una persona con un problema de desgaste profesional, ansiedad y estrés, es más propensa a tener accidentes de trabajo, su productividad está mermada y esto, por supuesto, afecta la rentabilidad de la organización”.
Por eso, Almazán insiste en la importancia de “tener centros de trabajo y organizaciones que sean saludables y equilibradas”.