Todos andamos nuestro propósito de vida.
Asumimos que encontrarlo implica llevar una vida con pasión, haciendo algo que nos hace verdaderamente felices, y más importante aun, con un trasfondo más allá de nuestro beneficio propio.
La cuestión es que muchas personas no saben qué hacer con su vida, y se sienten mal por esto, olvidándose que la vida misma se trata de eso; de descubrir, probar, intentar, fallar y finalmente construir un proyecto que nunca tendrá final, y que siempre se podrá mejorar.
Tu propósito de vida no se encuentra, es algo que se construye:
En lo personal, creo que el propósito de vida no es algo que se encuentra, sino algo que se construye.
Es decir, optar una actitud pasiva frente a descubrir lo que te apasiona no es el mejor plan para construir una vida ejemplar.
De nada sirve sentarse a pensar que estás desperdiciando tu vida, asumiendo que los demás tienen resuelto su futuro mientras que tú estás estancado en un trabajo que no disfrutas, donde la única felicidad son los fines de semana y tus vacaciones de dos semanas al año.
Entonces, ¿qué debes hacer para encontrar tu propósito de vida?
El objetivo de este artículo es compartir contigo una serie de consejos prácticos que puedas aplicar en tu día a día, de manera que no solo aprendas cómo ser feliz en la vida, sino que encuentres ese motivo que te haga saltar de la cama cada día.
Las inteligencias múltiples:
Aunque parezca contradictorio, la mejor manera de encontrar tu propósito es aplicando la metodología del descarte, la cual plantea que, en un comienzo, no necesitas saber qué hacer sino todo lo contrario, saber qué no hacer.
Es decir, identificar qué es lo que no te gusta.
Todos los seres humanos tenemos debilidades y fortalezas; hay temas que nos llaman la atención, mientras que existen otros que no nos interesan en absoluto, esto podría llamarse inteligencias múltiples.
Lastimosamente, una de las razones por la cual no encuentras tu propósito de vida, se debe a que la sociedad de hoy día ha hecho que las personas se preocupen por lo que hacen mal, y no por aquello en lo que son talentosos.
Por ejemplo, no es extraño que un niño que le vaya bien en dibujo, pero sea pésimo en matemáticas lo obliguen ir a cursos de ecuaciones y no en técnicas de dibujo, ya que nos han enseñado que “hay que reforzar aquellos aspectos que tenemos débiles».
Los profesionales son mediocres porque los obligan a saber de todo.COMPARTE EN TWITTER
Lastimosamente esta idea te ha llevado a saber un poco de todo, y a la vez no sepas nada en profundidad.
Cómo construir tu propósito de vida:
Entonces, la invitación antes de explicarte los pasos para encontrar tu propósito de vida es que dejes de buscar complacer a todo el mundo, al igual que querer saber de todo.
Más bien enfócate en aquellas actividades que realmente despiertan tu interés, ya estas representan el terreno óptimo donde se puede construir tu propósito.
1. Deja de compararte:
Nadie tiene resuelto su futuro. Muchas personas viven pendientes de lo que hacen los demás, de cuánto ganan, de sus trabajos soñados y del crecimiento personal que han tenido.
Esta sociedad nos ha enseñado a vender muy bien nuestro presente; desde las imágenes que publicamos en Instagram hasta las apariencias que no reflejan la realidad de las personas. Una cosa es lo que dicen y muestran, otra es la realidad que viven.
Así que mi sugerencia es que te centres en tu proceso y dejes de pensar que los demás tienen su vida resuelta. Ten la seguridad que están igual que tú, sin saber muy bien lo que hacen, con un mar de dudas y apariencias que ocultan estos miedos.
Cuando entiendas que cada quien libra su propia batalla, y que cada día es una oportunidad que tenemos para ganarla, tendrás la libertad para buscar con calma y sabiduría lo que quieres hacer con tu vida.
2. El trabajo es un medio, no un fin:
Cuando piensas en tu trabajo como un medio, y no como un fin, entiendes que ese trabajo que no termina de llenarte, es una experiencia más que vives, buena o mala, la cual te deja grandes enseñanzas de vida.
¿Cómo sacarle provecho a este tipo de situaciones? Identifica qué puedes aprender de tu trabajo actual, ya que esto será fundamental para encontrar tu propósito de vida. Recuerda que lo primero es saber qué es lo que no te gusta.
Además, estoy convencido que no todo lo relacionado con tu trabajo es malo, debe de haber aspectos que disfrutas y te entretienen; bien sea tus compañeros de trabajo, el pago que recibes, el ambiente laboral, entre otras.
Tu labor es encontrar cuáles son estas, al igual que aquellas que por nada en el mundo disfrutas hacer. Tener esto claro te pone en una posición ganadora respecto a tu futuro, ya que sabrás en qué campos te podrás enfocar y en cuales no.
3. Define qué es lo que no te gusta hacer:
Tal y como mencioné en el punto anterior, pregúntate qué te da pereza hacer en tu trabajo, en la universidad y en tu vida en general.
¿Disfrutas hablar con las personas?
¿Hablar de ciertos temas como música, finanzas, meditación, programas de televisión?
Si no te gusta, escríbelo. De esta manera harás consciente lo que ciertas actividades o temas te hacen sentir.
Una vez tengas claro que no te gusta, habrás eliminado demasiadas opciones dentro de la búsqueda de tu propósito de vida. Ahora bien, las dos pregunta claves y determinantes que deberás hacerte en algún punto son las siguientes:
¿Qué estás dispuesto a hacer todo un mes sin recibir un solo dólar a cambio?
¿Cómo puedes generar ingresos a partir de esta actividad?
4. Date permiso para probar cosas nuevas:
Antes de tomar una decisión regálate la oportunidad de probar cosas nuevas. Para esto debes utilizar eficientemente tu tiempo libre.
La gran mayoría de personas viven insatisfechos con la vida que llevan, pero no hacen nada al respecto; se quejan desde su cama, con un teléfono en la mano y envidiando todas las apariencias que ofrecen las redes sociales.
Son soñadores frustrados que tienen la solución en su tiempo libre, pero prefieren quejarse ya que es más fácil que actuar con base en la búsqueda de su propósito.
Pregúntate qué estás haciendo en tu tiempo libre; asiste a cursos de temas que te llaman la atención, compra un libro de algo interesante, aprende cómo crear un blog donde hables de tus experiencias personales, conoce personas nuevas de otros campos de conocimiento, haz cosas diferentes.
5. Define cuales son tus mejores habilidades profesionales:
Si quieres encontrar una carrera que amas, debes partir desde la identificación de tus fortalezas, o aquellas habilidades que te permiten diferenciarte del resto de personas.
Para lograrlo, aquí te dejo unos pasos, que consisten en tres preguntas que debes hacer para identificar tu propósito de vida:
¿Cuáles son mis habilidades?
Para empezar, escoge entre 5 y 10 personas que sientas que mejor te conozcan y divídelas en dos grupos.
Grupo 1: Reúne a los amigos con los cuales te conectas desde lo más profundo de tu ser, con los cuales compartes principios, valores y una visión de vida.
Grupo 2: Aquí tendrás a las personas con las cuales eres cercano, pero que se diferencian de tu personalidad, bien sea por su estilo de vida, trabajo o proyectos.
Empieza preguntando a cada persona de cada grupo cuales creen que, honestamente, son tus mayores fortalezas y habilidades, y cuáles son tus debilidades.
En esta primera pregunta es importante conseguir dos cosas:Tener una «investigación de mercado» acerca de tus habilidades y,
Generar un ambiente en el cual tu amigo pueda ser completamente honesto contigo.
Es posible que, debido a que tus amigos te quieren, estos no quieran decirte la verdad, ya que sienten que van a lastimarte o te harán pasar por momentos difíciles.
No obstante, entre más rápido te des cuenta para qué eres bueno, y para lo que eres malo, podrás enfocarte en lo verdaderamente importante: tu propósito de vida. Así que aguántate el dolor.
¿Cuáles son mis fortalezas?
No puedes tener una visión romántica de las habilidades que te han llevado a ser exitoso en la vida.
¿A qué me refiero? Piensa en el siguiente ejemplo, tú puedes ser un estudiante excelente por encima del promedio, pero no tener ningún interés por la academia.
Puedes ser extremadamente bueno jugando fútbol, y esto no ser lo que tú realmente quieres seguir en tu vida.
No tener una visión romántica, sin lugar a dudas te ayudará a encontrar tu propósito de vida, ya que esto implica utilizar estas fortalezas como base para identificar talentos que, quizás, anteriormente no conocías.
Tal y como mencionamos, el hecho de que algo no sea lo que tú quieres para tu vida no significa que no podamos rescatar habilidades y fortalezas que desarrollaste en esta actividad.
A manera de ejemplo, el hecho de que no te guste el fútbol no significa que tu habilidad para trabajar en equipo no sea importante. Así que no desperdicies tus habilidades, utilízalas para encontrar tu propósito de vida.
Pregúntale a extraños:
Utiliza todo el potencial que tiene el internet. Utiliza tus redes sociales, haz un video o una publicación preguntando a todas las personas que te siguen, la pregunta que tanto hemos repetido:
¿Cuáles son mis fortalezas?
Luego de colectar toda esta información a través de estos pasos, tendrás el criterio y las bases suficientes para tomar decisiones importantes.
Cuando tienes claro cuales son tus habilidades, sabes en qué eres bueno, teniendo en cuenta tu criterio y los consejos de tus amigos, podrás definir aspectos importantes en tu vida.
Por ejemplo, tendrás una gran cantidad de oportunidades, tales como:Buscar un trabajo nuevo según tus habilidades.
Aprender cómo iniciar un negocio propio en tu tiempo libre.
Buscar un socio que complemente tus habilidades y fortalezas y trabajar con ellos
Crear una empresa con tus amigos que te complementen.
Comenzar a ganar dinero por internet haciendo algo que te apasione.
6. Sigue tu curiosidad:
Sin importar que hayas encontrado o no tu propósito, es importante que sigas aquellas cosas que te llamen la atención; no importa que nunca antes lo hayas intentado, ya que la idea es que descubras intereses menos obvios.
Por esto es que es tan importante salir de tu zona de confort.
Cuando tienes la iniciativa de seguir aquellos intereses poco comunes, sales de tu comodidad y te abres mentalmente a la posibilidad de explorar nuevas cosas.
Un ejemplo de esto es la curiosidad de Steve Jobs por las tipografías, lo que le llevó a asistir a una clase aparentemente inútil de tipos de letra y desarrollar su sensibilidad de diseño.
Más tarde, esta sensibilidad se convirtió en una parte esencial de los ordenadores de Apple y un diferenciador principal del resto de marcas.
7. No hagas del dinero tu principal motivación:
Si estás buscando tu propósito de vida, y pasar tu años haciendo algo que te gusta, la mejor manera de empezar es tratar a las preocupaciones financieras como algo secundario.
Con esto no estoy diciendo que no sean importante tus finanzas personales. Es fundamental que aprendas cómo ahorrar dinero, generar nuevas fuentes de ingreso y administrar tu dinero.
Ahora bien, si limitas tu propósito de vida a la cantidad de dinero que puedes ganar en la actualidad, difícilmente encuentres algo que ames.
La idea es que trabajes primero en tus finanzas personales, de manera que tengas la libertad (así sea en tu tiempo de libre) de explorar qué otros intereses y gustos puedes desarrollar, al igual que aprender la manera de ganar dinero rápido con ellos.
8. Diferencia entre placer, pasión y propósito:
En su libro Delivering Happines, Tony Hsieh plantea que existen varios tipos de felicidades; está el placer, la pasión y el propósito.
El placer:
Es la felicidad del corto plazo, esa que disfrutamos en el instante y que la despierta las cosas materiales.
La pasión:
Esta felicidad que implica un mayor compromiso, ésta nos hacer sentir que el tiempo vuela y que todo lo demás pierde su importancia para nosotros.
El propósito:
Por último y más importante, esta felicidad es la que a diario debemos salir a buscar, y la cual se encuentra cuando hacemos parte de algo que es más grande que nosotros mismos.
El propósito se convierte en una razón para levantarse temprano, para sacrificar cosas que nos gustan y que por encima de todo, le da sentido a nuestra vida. Para construir el propósito de tu vida tendrás que tomar decisiones, y a su vez, renunciar a muchas otras.
Tanto así, y esto es algo que le pasa a muchas personas, es que cuando no tienen una pasión o no han construido su propósito, suelen anteponer lo urgente por encima de lo importante.
9. Está bien cambiar, retirarte y probar otras cosas:
Es normal que en esta búsqueda y construcción de un proyecto de vida que admires, cometas errores, tomes caminos que con el tiempo no eran los indicados, o simplemente cambies de opinión.
Hace poco leí que la única manera incorrecta de vivir es pensando que hay una manera correcta de hacerlo.
Es decir, el hecho que tomes una mala decisión no significa que lo estés haciendo mal, más bien es un proceso, donde las malas decisiones también tienen su lugar.
Entonces, el hecho que aun no tengas del todo claro cuál será el rumbo de tu vida no implica que tomes decisiones, cambies, renuncies o hagas lo que sientas que es necesario.
En muchas ocasiones, encontrar tu propósito de vida requiere que tomes riesgos, que confíes en ti mismo y des un paso hacia lo desconocido.
10. Tu propósito no es un golpe de suerte, es una disciplina:
El propósito de tu vida no es algo que te encuentras de la noche a la mañana, no es algo a lo que llegas después de pensarlo una mañana, o luego de una conversación.
Como podrás haber visto en este artículo, el propósito de tu vida es producto de tu disciplina.
Es el resultado de estar constantemente buscando nuevas actividades, oportunidades de negocio, conociendo nuevas personas, y cuando encuentres algo que te interese, dedicarte a practicarlo y perfeccionarlo.
Es el resultado de tener la disciplina para decir no al resto de posibilidades, para rechazar «caminos fáciles» y de tener una visión de largo plazo; ya que la grandeza requiere de tiempo, dedicación y mucho esfuerzo.
Cuando te comprometas, entenderás que tu propósito más allá de trabajar poco o de estar haciendo algo que te agrade, es poder contribuir de una manera única a las personas que tienes a tu alrededor.
Conclusiones
El único objetivo de este artículo es que te trabajes por aquello que verdaderamente amas.
No minimices tus sueños al tamaño de tu realidad actual, más bien trabaja para que tu versión actual adquiera las habilidades necesarias para que tus sueños, y propósito de vida, se hagan realidad.
Debemos saber, que tener un propósito en nuestras vidas, mas que un camino hacia la felicidad, es la felicidad en sí misma. Construyamos un propósito de vida. Seamos honestos con nosotros mismos. Eso es felicidad. Eso es vivir con sentido.