Sin quitarse los condones


Las personas afectadas pueden demandar a los infractores, pero no se pueden presentar cargos penales

Muchas de las personas que se han enfrentado al ‘stealthing’ lo ven como una especie de violación.

Buen recibo ha tenido la norma promulgada por las autoridades de California que prohíbe el retiro no consensuado del condón, es decir que condena lo que se conoce como ‘stealthing’, lo que de paso convierte a este estado en el primero de los Estados Unidos en tratar legalmente esta indebida práctica.

En efecto, la nueva ley les da a las víctimas una vía jurídica para demandar a quienes de manera inconsulta se retiren la protección independientemente de los agravantes que esto puede acarrear en términos de embarazos o de alteraciones para la salud, empezando por las infecciones de transmisión sexual. En palabras de Cristina García, la asambleísta que defendió el proyecto, lo que se busca con esto es tener la seguridad de que esto no se quede como una mera acción indebida y moral, sino que también sea ilegal. En concreto, las personas afectadas pueden demandar a los infractores por daños, pero no se pueden presentar cargos penales, aunque algunos analistas consideran que esto podría empezar a considerarse en razón a que en esencia se trata de un delito menor de agresión sexual.

Lo cierto es que muchas de las personas que se han enfrentado a esta situación llegan a vincular el acto como una especie de violación, a la cual se le suma la incertidumbre por los efectos potenciales.

Como se sabe, el ‘stealthing’ (que en inglés significa sigilo o secretamente), si bien era algo silente, en los últimos tiempos ha llegado a convertirse en una especie de tendencia favorecida por su difusión a través de las redes sociales y de hecho en Alemania y el Reino Unido es considerada una forma de violación sexual y debe tratarse como tal.

Y este fenómeno ha empujado a algunas personas a presentar demandas contra los medios y los canales que difundan el ‘stealthing’, porque, según su criterio, esta no es una nueva tendencia, sino la consolidación de otra forma de abuso.

Velar por que los condones se queden en su sitio como un elemento básico de respeto y de la consideración por el otro debería ser una tarea general.
Julio Cesar Moreno Duque

soy lector, escritor, analista, evaluador y mucho mas. todo con el fin de aprender, conocer para poder aplicar a mi vida personal, familiar y ayudarle a las personas que de una u otra forma se acercan a mi.

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