15 Malos hábitos que debes eliminar para vivir mejor

Sin importar que sean buenos, o malos hábitos, lo que haces cada día determinará cómo vivirás. Son tus comportamientos, o las decisiones que tomas todos los días, lo que determina si eres exitoso o no, y qué tanto vas a triunfar en el largo plazo en tu vida.

Todo en la vida es una elección, así que cuando optas por ciertos comportamientos estás renunciando a otros. Pregúntate cómo te imaginas viviendo y luego analiza si lo que haces desde que te levantas, hasta que vas a la cama en la noche, está alineado con esta vida.

En caso de que esto no sea así, revisa los siguientes hábitos y toma las decisiones correspondientes para empezar a vivir de una manera más coherente frente a lo que aspiras a lograr.
Malos hábitos a los que debes renunciar hoy:


Para alcanzar la grandeza y ser una persona exitosa debes tomar decisiones difíciles. Y los hombres exitosos no tuvieron ningún problema en renunciar los siguientes malos hábitos que leerás a continuación.

En el momento en el que decides renunciar a estos hábitos, entenderás que para tener una vida con más plenitud, es necesario enfocarse y cambiar la negatividad que nos rodea en el día a día.

Es por esto que si quieres aprender cómo ser exitoso, aquí tienes las primeras decisiones difíciles que te encaminarán hacia tus objetivos.
1. Creer que el mundo gira a tu alrededor:

Si actúas como si el mundo girara a tu alrededor, deberás tener el talento suficiente que respalde dicho comportamiento. De hecho, estar demasiado concentrado en ti mismo hace que pierdas efectividad.

Una cosa es saber tu valor y tener confianza en ti mismo, otra muy diferente pensar que estás por encima de los demás, que tus decisiones son un referente mundial, y que todo el mundo debe escucharte porque tú te lo mereces.

Nunca olvides la importancia de la humildad, de escuchar a los demás, de ayudar en la manera que sea posible y recordar que el éxito, al final, también se mide en términos de qué tanto impactaste positivamente la vida de los demás.

Todo el mundo tiene problemas, particularidades y circunstancias de las cuales tienen que hacerse cargo, así que deja este tipo de malos hábitos que te hacen suponer que todo gira en torno a tus necesidades.
2. Compararse con los demás:

Uno de los malos hábitos a los que renunciaron las personas exitosas fue compararse con los demás. De hecho, siempre habrá alguien más inteligente, con mejor aspecto, más rico y (aparentemente) más feliz.

Así que en lugar de comparte con los demás, más bien concéntrate en tu proceso; en tu mentalidad, tu salud, tus buenos hábitos y tus objetivos.
No todo el mundo te va a querer:

En este proceso de enfocarte tu crecimiento personal sucederá que no todo el mundo va a estar feliz contigo, y eso está bien. No todo el mundo tiene que quererte.

Cuando entiendas que siempre habrán personas que por más que te esfuerces, simplemente no serás de sus afectos, dejarás de buscar aprobación en los demás y empezarás a actuar bajo tus principios y valores.
3. Elimina el hábito del multitasking:

La ciencia ha demostrado que el multitasking es imposible. De hecho, como plantea Gary Keller, en uno de los mejores libros de productividad, Una sola cosa, este concepto que viene de la informática no aplica en los seres humanos.

Es más, intentar vivir haciendo varias cosas al mismo tiempo solo nos llevará a perder el tiempo, debido a que a medida que vamos intercalamos actividades, el cerebro deberá irse ajustando cada vez a los cambios, lo cual toma su tiempo.

Así que renuncia a este tipo de malos hábitos y enfócate en hacer muy bien aquella actividad más importante de tu lista de pendientes.

Una vez completes la primera, continúa con la siguiente, dejando de lado las aplicaciones de tu celular, los navegadores y aquello que te robe tu atención.
Revisar tus redes sociales cuando trabajas:

Adicionalmente, si realmente quieres ser más productivo deja de revisar las redes sociales mientras estás en el trabajo. Para dejar estos malos hábitos puedes desactivar las notificaciones de tu celular, así no estarás tentado a revisarlo.
4. Desperdiciar el activo más importante: tu tiempo

De los malos hábitos que más afectan tu vida, desperdiciar tu tiempo, creería que es el más malo de todos.

Una de las señales que indican que estás perdiendo tu tiempo es si dices sí a todo, ya que esto muestra que no tienes claras tus prioridades. Si deseas corregir esto, hemos creado un artículo donde te explicamos cómo decir no de manera fácil.

A continuación te mostramos algunas maneras que desperdicias el tiempo:
Deja de malgastar tu tiempo con personas negativas:

Otra forma de desperdiciar tu tiempo, y que representa otro de esos malos hábitos a los que deberías renunciar, es rodearte de personas tóxicas que no agregan valor en tu vida.

Si no te aman, ni te apoyan, aléjate de ellos. No tienes que decirlo oficialmente, simplemente deja de estar disponible para esas
Elimina las reuniones largas e inútiles:

Menos tiempo en reuniones significa más productividad. Así que para dejar de gastar tu tiempo en estas reuniones establece una agenda. A medida que se ejecuta la reunión a través de la agenda, invita a todos tus compañeros a que digan:
En qué están trabajando.
Lo que han completado.
Lo que necesitan para completar en lo que todavía están trabajando.

Funciona, y no solo ahorrarás dinero, sino que dejarás de perder tu tiempo.
5. Preferir la satisfacción del corto plazo sobre los resultados del largo plazo:

Cada vez que elijas un resultado fácil hoy por la grandeza de mañana, recuerda una de las frases de Steve Jobs más famosas: “estoy convencido de que lo que separa a emprendedores exitosos de los no exitosos es pura perseverancia”.

Para ser perseverante debes encontrar un propósito, debes encontrar algo que sea más grande que tú y por lo que valga la pena trabajar constantemente.

Cuando no has construido tu propósito de tu vida, resulta fácil caer en malos hábitos como preferir ganancias inmediatas por encima de la creación de valor a largo plazo.

Recuerda que las cosas grandes en la vida requieren tiempo, esfuerzo, sacrificios y mucha dedicación. Por lo general para llegar a la grandeza tendrás que decir no a muchas satisfacciones temporales que te alejan de tu meta.
6. Olvidar la importancia del presente:

Aprende lo que sea necesario del pasado, pero no te quedes estancado en él. De igual manera, puedes planear y soñar con todos los negocios del futuro, pero si tus acciones no están enfocadas en el presente, nunca alcanzarás tus planes y mucho menos tus sueños.

Lo único que tienes es este momento, este preciso momento en el que estás leyendo esto, así que aprovéchalo: toma las decisiones que llevas aplazando, renuncia definitivamente a los malos hábitos y asume que hoy, en este mismo instante, es el comienzo de una nueva vida.

Adicionalmente, toma el coraje de cuestionarte tu situación actual. Pregúntate, ¿estás en el lugar que deseas en tu vida? ¿Estás cumpliendo con tus objetivos y metas propuestas?

Recuerda que aquello que no se mide no se mejora, y si te pasas la vida «viviendo el momento» sin cuestionarte hacia donde quieres ir, difícilmente avanzarás.

Las personas exitosas entienden que ellos están en control de sus vidas, así que dejaron de jugar el papel de víctimas, se hicieron responsables de su día a día y dieron el primer paso para lograr un cambio radical en sus vidas.

7. Dejar que las emociones te dominen:

Sea cual sea el sentimiento con el que te estés enfrentando; bien sean celos, envidia o inferioridad, no existe una razón que justifique que te desquites con las demás personas.

Cuando permites que tus emociones te dominen, estás dando el control a la situación y estás dejando que una circunstancia sea más grande que tu visión de largo plazo.

¿Cómo pretendes ser una persona exitosa, montar un negocio rentable y exitoso, o destacarte en tu industria, si no logras dominar tus emociones? Primero debes aprender a controlarte, para luego dominar la situación que te rodea.
No pierdas la perspectiva:

Uno de los malos hábitos que afectan a las personas es perder la perspectiva, lo cual afecta su comportamiento, las decisiones que toman y a las conclusiones que llegan.

Cuando sientes que se ha perdido todo, que lo que estás viviendo no tiene arreglo o que «estás acabado», recuerda que como asumes las circunstancias, y no los eventos como tal, es lo que defines quien serás.

Esto se conoce como inteligencia emocional, y deberás trabajar en ella para conseguir grandes resultados en la vida.

Cuando trabajas en tu inteligencia emocional suceden dos cosas:
– Dominas la voz negativa en tu mente:

Tener disciplina mental te permite controlar los pensamientos negativos que llegan a tu mente, los cuales se convierten en muchas ocasiones en tu peores enemigos.
– Dejas la hipersensibilidad:

Hay muchas personas con una piel tan débil que cualquier crítica los ofende, o cualquier halago los lleva a la cima. Tener inteligencia emocional significa tener claro cuánto vales en tu interior.

Esta es la razón por la cual los empresarios exitosos tienen cierto toque de humor y humildad, ellos no se toman nada personal ya que entienden que su valor personal no varia según el tipo de opinión que escuchan
8. No asumir la responsabilidad de tu vida:

Cuando no eres responsable de lo que sucede en tu vida, le estás dejando el control de tu vida al azar, o a lo que pueda ocurrir en el momento. Así que deja este mal hábito de no adueñarte de lo que está ocurriendo y asume los momentos difíciles.

Todos tenemos que enfrentar situaciones de alta presión y llenas de estrés son comunes, independientemente de lo que hagas. Es más, las cosas algunas veces no resultarán como se planean y también saldrán terriblemente mal.

No obstante, las personas exitosas saben cómo quitar el estrés, ellos controlan los excesos de adrenalina y consiguen mantener la calma en los momentos cuando todo el mundo cree que no hay nada para hacer.

Si quieres responsabilizarte de lo que sucede en tu vida, aprender a tomar decisiones difíciles en momentos complejos y tener una mente calmada, capaz de tomar decisiones creativas, haz lo siguiente:
Elimina el hábito de quejarte:

Quejarse no vale la pena, este tipo de malos hábitos no solo te afectan a ti, sino a las personas que tienes a tu alrededor. Cuando hables asegúrate de que tus palabras sean positivas, sincronízalas con tus pensamientos positivos. Recuerda que tu mente es poderosa.

Deja de crear excusas:

Otro de los malos hábitos que debes eliminar es entender que no hay excusas, no existen razones para no lograr tus objetivos; las razones son solo excusas maquilladas.

Si quieres triunfar en la vida tendrás que renunciar a las excusas y comenzar a buscar maneras, métodos e ideas que te permitan alcanzar tus objetivos.
9. Esperar demasiado de las personas:

Todos somos imperfectos. El perfeccionismo es el camino más rápido a una vida insatisfecha.

No obstante, esto no significa que debas conformarte con personas mediocres, trabajos aburridos o que dejes pasar oportunidades de negocio y crecimiento.

Las personas exitosas buscan oportunidades y personas que los haga dar lo mejor de sí mismos, que los haga crecer y exigirse.

Para esto, espera menos del mundo exterior y enfócate en todas aquellas áreas de tu vida donde los resultados dependan de tu actitud y esfuerzo. Si bien tienes que rodearte para crecer, asegúrate en primer lugar de hacer bien tu tarea.

10. Dejar la pereza (y la mediocridad):

Aquellos que están enfocados en conseguir grandes cosas suelen conocer una realidad fundamental: A largo plazo se necesita trabajo duro. No hay otra fórmula.

Esta es la razón por la cual las personas exitosas son disciplinados, son enfocados en su objetivo y tienen la fuerza de voluntad para lograr lo que se proponen.

Tal y como mencionamos anteriormente, la triste realidad y uno de los malos hábitos más comunes que tienen las personas es que no están dispuestas a sacrificarse por sus metas, prefieren los resultados de corto plazo por encima de las ganancias de largo plazo.

No es ningún secreto que les da pereza esforzarse, y estas son las razones por las cuales no alcanzan nada grande en la vida.
11. Decir “sí” cuando deberías decir “no”:

Investigaciones conducidas en la Universidad de California en San Francisco muestran que mientras más difícil te sea decir que no, más probabilidades tienes de experimentar estrés, cansancio e incluso depresión.

Decir que no a nuevos compromisos honra tus compromisos existentes y te da la oportunidad de completarlos exitosamente. Solo recuerda que decir que no es un acto de autocontrol que aumentará tus probabilidades de éxito.
12. Quedarte callado respecto a tu salud mental:

Según un estudio, las personas con depresión son 3.4 veces más probables de tener problemas de memoria en comparación con aquellos que no.

Los desordenes en tu estado de ánimo representan un riesgo si no encuentras quien te ayude con ellos. No solo estás acabando con tu cerebro, sino que estás acabando con tus relaciones personales.

Busca ayuda, encuentra con quien hablar; en un comienzo lo puedes hacerlo con un amigo, pero si sientes que no es suficiente, acude a ayuda profesional.
13. En cuestiones de comida, preferir lo rápido en lugar de lo saludable:

Según una investigación, una dieta llena de grasas saturadas incrementan las posibilidades de sufrir problemas de memoria en el futuro.

Las grasas saturadas incrementan la inflamación y comprometen la barrera hematoencefálica, una membrana que funciona como sistema de seguridad controlando los nutrientes que entran en tu cerebro y evitando sustancias peligrosas.

Si bien no se ha definido los niveles en los cuales la grasa saturada es mala, es preferible que tomes alimentos saludables, bajos en grasa y que realmente beneficien la función de tu cuerpo.

En definitiva, si quieres vivir diferente deberás renunciar a este tipo de malos hábitos que contribuyen a tu salud y bienestar físico.

14. Revisar tu celular antes de dormir:

Si bien tenemos la costumbre de revisar nuestro teléfono antes de dormir, este mal hábito perjudica gravemente la salud de tu cerebro.

Primero, la luz de la pantalla del teléfono impide que te quedes dormido, y segundo se afecta la calidad de tu sueño. Esto se debe a que la exposición a esta luz suprime la producción de la hormona del sueño: La melatonina.

El sueño es absolutamente crítico para descansar tu cerebro y mantener tu capacidad congnitiva. Además, la adicción a redes sociales incrementa la probabilidad de sentir estrés. Así que intenta no revisar tu celular por lo menos una hora antes de irte a la cama.
15. Dejar que las apariencias se hagan cargo de tu vida:

La gente está trabajando en empleos que no quieren, yendo a casa de personas que no aman, y viviendo en ciudades que odian, porque tienen miedo de tomar decisiones difíciles y diferentes.

Este es quizás uno de los peores malos hábitos que tienen las personas, que consiste en dejar que la imagen que tienen los demás de sí mismos sea más importante que la vida que quieren vivir.

En conclusión, cada uno de estos malos hábitos están impidiendo que se haga realidad el estilo de vida que tienes en tu mente. Si quieres cambiar como vives, deberás cambiar aquellos hábitos que practicas a diario. Así que comienza hoy renunciando a estos malos hábitos.
Julio Cesar Moreno Duque

soy lector, escritor, analista, evaluador y mucho mas. todo con el fin de aprender, conocer para poder aplicar a mi vida personal, familiar y ayudarle a las personas que de una u otra forma se acercan a mi.

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