En estos momentos de propósitos vale la pena echar una mirada a este aspecto y sacarle provecho.
No se reprima y eche a andar alguna de las fantasías que tiene guardas y que sea posible.
El sexo forma parte normal de la vida y es tan importante como cualquier función en el organismo, de ahí que en estos momentos de propósitos vale la pena echar una mirada sincera a este aspecto y procurar sacarle el mayor provecho, para lo cual no necesita hacer público nada, simplemente actuar.
Aunque suena simple, hay que empezar por derribar tanta mojigatería que se enreda a los temas del catre y convencerse de que la planta baja no está ligada con el pecado, lo inmoral o lo sucio y que no se puede ceder la autonomía en las decisiones de este tipo por tontas que parezcan. Así de sencillo.
Por otro lado es mandatorio ampliar la comunicación de estos temas con la pareja o parejas que se tengan, con el objetivo es dejar claro gustos, frecuencias, negativas y mantener, sin restarle fantasía y sorpresa a las encamadas, unos acuerdos mínimos para actuar con tranquilidad.
No está demás evitar las reacciones fingidas. Si no se alcanzó un orgasmo no es necesario que lo invente, como tampoco decir que se está de maravilla cuando no y menos tratar de convencer a la otra persona de lo que en realidad no es sobre la cama. Para eso es la comunicación. La sinceridad resulta más grata que los gritos y movimientos de libretos.
Es hora, si no lo ha hecho, de que explore su cuerpo y descubra las maravillas que ofrece en términos de auto placer. No solo se sentirá bien, sino que le proporcionará herramientas para determinar el tipo de sensaciones que más le satisfacen y las que le pueden disgustar. Masturbarse, por su seguridad y otras ventajas, debe ser práctica grata de todos en este año que se inicia.
No se reprima y eche a andar alguna de las fantasías que tiene guardas y que sea posible. No todas son perversas o inalcanzables, haga un listado y empiece por las que estén más a las mano, le gustará.
Sálgase del la cama y pruebe otros sitios como escenarios de los polvos. La cocina, el baño, la mesa del comedor, el tapete o el sofá de la sala son de fácil acceso y proporcionan elementos de complicidad y cercanía a la hora de poner a funcionar el departamento inferior.
Si puede, tómese un descanso y ponga la actividad bajo las sábanas como el eje de las escapada. Planéelo bien, resultará gratificante.
Por supuesto, no todo es placer y en los pronósticos también debe existir espacio para revisar el equipamiento anatómico y funcional del aquello. Citologías, y consultas ante cualquier molestia deben estar sin aplazamientos.
Y aunque lo he repetido, no está demás insistir en que el erotismo es más que el coito; llevar más la iniciativa, insistir en prácticas seguras, el uso de los condones y, por encima de todo, gozar sobre el catre.
Eso ayuda en momentos en que la tal pandemia parece que nos acompañará por otros meses.
Año nuevo, polvos renovados.