Repasamos las lecciones que el psicólogo Tomás Navarro nos ofreció en el directo de Instagram de OB, en el que aprovechó para presentarnos su nuevo libro “Eres más fuerte de lo que crees”, escrito especialmente para gestionar emocionalmente este periodo de incertidumbre derivado de la pandemia.
Aceptar no significa que estés de acuerdo, sino que entiendes que la realidad es la que es
“Eres más fuerte de lo que crees. Kit de rescate emocional para afrontar la crisis” es el título del último libro del prolífico psicólogo y divulgador Tomás Navarro. Pero, en esta ocasión, hay algo que lo diferencia mucho del resto de sus obras: el libro ha sido escrito en tan solo una semana, desde su casa, en pleno confinamiento, y con el objetivo de ofrecer herramientas a todos sus lectores para sacar lo mejor de ellos mismos y afrontar así esta situación excepcional que estamos viviendo.
Tomás ha sido, además, uno de los profesionales que ha participado en los directos de Instagram que desde Objetivo Bienestar estamos realizando estos días, y lo ha hecho, precisamente, para recoger las inquietudes y preocupaciones que muchos de nosotros tenemos y ayudarnos a contrarrestar el miedo, la inseguridad, la ansiedad o el estrés que se han convertido en emociones tan comunes durante este tiempo.
Así que, durante una hora, Tomás nos obsequió con su tiempo, con su conocimiento y con su gran talento para la divulgación de ideas complejas, dando respuesta a las muchas preguntas que los seguidores de Objetivo Bienestar le formularon en directo.
Aquí tienes algunas de las citas de Tomás Navarro durante su charla online:
“Estamos viviendo una realidad incierta, jamás hubiéramos pensado en una crisis semejante y es normal que sintamos miedo, inseguridad, ansiedad, estrés. Pero también poseemos una capacidad inmensa de resiliencia para superar momentos difíciles y una fortaleza emocional innata.”
“El mensaje es claro: identifica tus sentimientos, cuídate, permítete sentir y utiliza todo tu potencial y creatividad para hacer frente a la adversidad y salir reforzado.”
“Hemos olvidado que estamos frente a una carrera de fondo del confinamiento: empezamos con mucha energía, pero la hemos ido perdiendo con el tiempo. Muchos nos hicimos buenos propósitos al inicio, como ponernos a dieta, leer muchos libros o aprender algo nuevo, pero este no es el mejor momento para empezar cosas nuevas que requieran un esfuerzo ya que nuestra capacidad de esfuerzo es limitada.”
“En vez de papel de váter, al inicio del encierro, mi mujer y yo compramos chocolate porque somos humanos y sabemos que tendremos días buenos y días malos”
“Siempre que podamos, tenemos que ir al origen del problema.”
“La premisa es la misma: cuídate para poder cuidar”.
“Tenemos que buscar momentos de “oasis de bienestar” que nos regeneren: en el plano físico, como un baño, una siesta, un masaje, etc., en el plano cognitivo, que te estimule o te desconecte y te relaje. Y en el plano afectivo o emocional, como una llamada a un ser querido, leer, etc. Y no hacerlo solo el fin de semana sino cada día para que no se acumulen las emociones negativas.”
“Durante mucho tiempo se pensó que las emociones eran opuestas: calma/estrés. Blanco o negro, pero no es así y tenemos que buscar momentos que nos provoquen sentimientos positivos.”
“En la incertidumbre que vivimos, se trata de que, sobre la marcha, podamos ir analizando y tomando las decisiones más adecuadas.”
“Nos hemos acostumbrado a vivir en la calma, pero tenemos muchísimas capacidades que nos permiten vivir en otros entornos.”
“El pensamiento consciente no llega ni al 10% de todo lo que hacemos habitualmente. Y pensar cansa, y en seguida nos acostumbramos a vivir en rutina. Pero lo cierto es que tenemos los recursos para gestionar situaciones inciertas, solo debemos ponerlos en marcha.”
“Aceptar no significa que estés de acuerdo, sino que entiendes que la realidad es la que es. No mezcles el deseo con el análisis de la realidad y le des la medida justa de lo que es. Tenemos que poner la imaginación a nuestro servicio, no condicionada por el deseo.”
“Si consideramos que no tenemos alternativas, no las veremos. De esta forma, el análisis se vuelve parcial.”
“Como estamos tensos y vemos el futuro negro e inseguro, nuestras capacidades para hacerle frente menguarán. Y, de esta forma, puedes estar descartando opciones que pueden ser buenas.”
“A la imaginación no hay que anularla sino despertarla en la buena dirección.”
“Ocúpate en vez de preocuparte. Eres más fuerte de lo que crees. Cuando nos pasa algo nos planteamos si le podemos hacer frente o no. Si miras a tu archivo y no encuentras nada, te da ansiedad y evitas la situación, pero es importante que sepamos que tenemos recursos.”
“Todos hemos pasado por situaciones incómodas e inciertas como estar en el paro, enfrentarse a un parto, a un reto deportivo, etc. y tenemos que recurrir a esos recursos que utilizamos esa vez para salir adelante.”
“Caer en la culpa o en crítica no ayuda para nada. Lo que tenemos que hacer es transformar las preocupaciones en acciones. “
“Nuestra generación no está acostumbrada, en general, a sufrir demasiado. No hemos pasado tiempo comiendo garbanzos secos, ni nos hemos visto obligados a emigrar, o hemos vivido una posguerra, como hicieron muchos de nuestros abuelos.”
“Hay cosas que relajan sí o sí, como la actividad física moderada, el contacto con el agua o los masajes, que también podemos hacernos nosotros mismos con una pelota de tenis en los pies. Esto relaja al 100% de las personas.”
“Mucha gente confunde la amistad con un psicólogo o con un banco. Y, a veces, hay que hacer limpieza. Porque en una relación de amistad tiene que haber correspondencia.”
“En casa, como en todo en la vida, hay que ser flexibles y compatibilizar las necesidades de las distintas personas que viven en el hogar: adaptarnos, con los recursos que tenemos, a las circunstancias que tenemos.”
Aceptar no significa que estés de acuerdo, sino que entiendes que la realidad es la que es
“Eres más fuerte de lo que crees. Kit de rescate emocional para afrontar la crisis” es el título del último libro del prolífico psicólogo y divulgador Tomás Navarro. Pero, en esta ocasión, hay algo que lo diferencia mucho del resto de sus obras: el libro ha sido escrito en tan solo una semana, desde su casa, en pleno confinamiento, y con el objetivo de ofrecer herramientas a todos sus lectores para sacar lo mejor de ellos mismos y afrontar así esta situación excepcional que estamos viviendo.
Tomás ha sido, además, uno de los profesionales que ha participado en los directos de Instagram que desde Objetivo Bienestar estamos realizando estos días, y lo ha hecho, precisamente, para recoger las inquietudes y preocupaciones que muchos de nosotros tenemos y ayudarnos a contrarrestar el miedo, la inseguridad, la ansiedad o el estrés que se han convertido en emociones tan comunes durante este tiempo.
Así que, durante una hora, Tomás nos obsequió con su tiempo, con su conocimiento y con su gran talento para la divulgación de ideas complejas, dando respuesta a las muchas preguntas que los seguidores de Objetivo Bienestar le formularon en directo.
Aquí tienes algunas de las citas de Tomás Navarro durante su charla online:
“Estamos viviendo una realidad incierta, jamás hubiéramos pensado en una crisis semejante y es normal que sintamos miedo, inseguridad, ansiedad, estrés. Pero también poseemos una capacidad inmensa de resiliencia para superar momentos difíciles y una fortaleza emocional innata.”
“El mensaje es claro: identifica tus sentimientos, cuídate, permítete sentir y utiliza todo tu potencial y creatividad para hacer frente a la adversidad y salir reforzado.”
“Hemos olvidado que estamos frente a una carrera de fondo del confinamiento: empezamos con mucha energía, pero la hemos ido perdiendo con el tiempo. Muchos nos hicimos buenos propósitos al inicio, como ponernos a dieta, leer muchos libros o aprender algo nuevo, pero este no es el mejor momento para empezar cosas nuevas que requieran un esfuerzo ya que nuestra capacidad de esfuerzo es limitada.”
“En vez de papel de váter, al inicio del encierro, mi mujer y yo compramos chocolate porque somos humanos y sabemos que tendremos días buenos y días malos”
“Siempre que podamos, tenemos que ir al origen del problema.”
“La premisa es la misma: cuídate para poder cuidar”.
“Tenemos que buscar momentos de “oasis de bienestar” que nos regeneren: en el plano físico, como un baño, una siesta, un masaje, etc., en el plano cognitivo, que te estimule o te desconecte y te relaje. Y en el plano afectivo o emocional, como una llamada a un ser querido, leer, etc. Y no hacerlo solo el fin de semana sino cada día para que no se acumulen las emociones negativas.”
“Durante mucho tiempo se pensó que las emociones eran opuestas: calma/estrés. Blanco o negro, pero no es así y tenemos que buscar momentos que nos provoquen sentimientos positivos.”
“En la incertidumbre que vivimos, se trata de que, sobre la marcha, podamos ir analizando y tomando las decisiones más adecuadas.”
“Nos hemos acostumbrado a vivir en la calma, pero tenemos muchísimas capacidades que nos permiten vivir en otros entornos.”
“El pensamiento consciente no llega ni al 10% de todo lo que hacemos habitualmente. Y pensar cansa, y en seguida nos acostumbramos a vivir en rutina. Pero lo cierto es que tenemos los recursos para gestionar situaciones inciertas, solo debemos ponerlos en marcha.”
“Aceptar no significa que estés de acuerdo, sino que entiendes que la realidad es la que es. No mezcles el deseo con el análisis de la realidad y le des la medida justa de lo que es. Tenemos que poner la imaginación a nuestro servicio, no condicionada por el deseo.”
“Si consideramos que no tenemos alternativas, no las veremos. De esta forma, el análisis se vuelve parcial.”
“Como estamos tensos y vemos el futuro negro e inseguro, nuestras capacidades para hacerle frente menguarán. Y, de esta forma, puedes estar descartando opciones que pueden ser buenas.”
“A la imaginación no hay que anularla sino despertarla en la buena dirección.”
“Ocúpate en vez de preocuparte. Eres más fuerte de lo que crees. Cuando nos pasa algo nos planteamos si le podemos hacer frente o no. Si miras a tu archivo y no encuentras nada, te da ansiedad y evitas la situación, pero es importante que sepamos que tenemos recursos.”
“Todos hemos pasado por situaciones incómodas e inciertas como estar en el paro, enfrentarse a un parto, a un reto deportivo, etc. y tenemos que recurrir a esos recursos que utilizamos esa vez para salir adelante.”
“Caer en la culpa o en crítica no ayuda para nada. Lo que tenemos que hacer es transformar las preocupaciones en acciones. “
“Nuestra generación no está acostumbrada, en general, a sufrir demasiado. No hemos pasado tiempo comiendo garbanzos secos, ni nos hemos visto obligados a emigrar, o hemos vivido una posguerra, como hicieron muchos de nuestros abuelos.”
“Hay cosas que relajan sí o sí, como la actividad física moderada, el contacto con el agua o los masajes, que también podemos hacernos nosotros mismos con una pelota de tenis en los pies. Esto relaja al 100% de las personas.”
“Mucha gente confunde la amistad con un psicólogo o con un banco. Y, a veces, hay que hacer limpieza. Porque en una relación de amistad tiene que haber correspondencia.”
“En casa, como en todo en la vida, hay que ser flexibles y compatibilizar las necesidades de las distintas personas que viven en el hogar: adaptarnos, con los recursos que tenemos, a las circunstancias que tenemos.”