Como la mayoría de las cosas en la vida, la calidad termina siendo más importante que la cantidad; incluyendo el sueño cuando se trata de levantarse temprano.
Hemos leído que las horas óptimas de sueño deben ser entre 6 y 8 horas. No obstante, si nos pasamos toda la noche mirando para el techo o dando vueltas en la cama, difícilmente descansarás y mucho menos levantarse temprano.
¿Qué quiere decir esto?
Que para levantarse temprano, recargado de energía y con la ambición de rendir al máximo no tienes que irte a la cama a las 8 de la noche.
Más bien tienes que asegurarte que las horas que duermas sean de calidad, es decir, que duermas placentera y profundamente.
Así que para evitar levantarse temprano sintiéndote cansado, y sin estar pensando cuando será de noche nuevamente para volver a dormir, aquí tienes 6 hábitos que debes aplicar antes de dormir y cuando recién te levantes que te permitirán tener un excelente día:
Para levantarse temprano, antes de dormir…
1. Evita consumir bebidas con cafeína:
Esto incluye bebidas como el café y gaseosas, vino rojo y el chocolate:
Lo primero que se necesita para levantarse temprano sin sentirte cansado es llegar al ciclo de tu sueño donde logras descansar profundamente.
Normalmente se dice que tardas 4 horas en llegar a él, así que si constantemente se interrumpe tu sueño, difícilmente vas a descansar.
Una de las razones principales por las cuales nuestro sueño se interrumpe se debe a nuestra alimentación y ciertas bebidas que afectan nuestro sistema digestivo y por ende el ciclo de sueño.
El café, la gaseosa, el chocolate que tomas y el vino rojo son algunos ejemplos, así que evítalos al máximo luego de tu almuerzo.
Si eres de los que necesita un café para sobrevivir a tus tardes, evita tomarlo 6 horas antes de irte a dormir para lograr levantarse temprano estando recargado de energía.
2. Ve al baño antes de irte a dormir:
Solemos ir al baño en la noche, pero no antes de dormir. Vamos al baño, y luego leemos algún libro, vemos televisión o jugamos videojuegos antes de dormir.
Mientras te entretienes y luego cuando te duermes, tus riñones siguen trabajando, tu vejiga sigue llenándose.
Así que entre más tiempo dejes pasar antes de dormir, más temprano sentirás ganas de entrar al baño el día siguiente.
El efecto que sentirás será en la mañana, esfuérzate (así no tengas ganas) por entrar al baño estrictamente antes de irte a dormir.
3. La manera como está organizada tu habitación:
Este principio se basa en la filosofía del Feng Shui, el cual busca una ocupación a consciencia del espacio y así lograr una influencia positiva en las personas que lo habitan.
¿Qué tiene que ver todo esto con levantarse temprano y dormir placenteramente? Pues que la ubicación de tu cama respecto a tu habitación, aunque no lo creas, tiene un efecto sobre tus hábitos de sueño.
Asegúrate de ubicar tu cama en un lugar donde puedas ver la puerta estando acostado, no directamente, sino en una posición donde puedas “controlar” tu habitación.
Esto transmite una sensación de seguridad que te permite alcanzar más rápido ese umbral de descanso que hablamos en el primer punto.
Qué hacer para levantarse temprano en la mañana…
4. Enfócate en algo positivo y feliz cuando te levantes de la cama:
Evita al máximo ese pensamiento en tu cabeza de que no dormiste lo suficiente.
Esto solo hará las cosas más difíciles en tu día, ya que el primer pensamiento es uno de los responsables de tu estado de ánimo durante tu día.
Es por esto que cuando tienes una celebración, aniversario y fiesta durante ese día, y te levantas pensando en ello, te resulta mucho más fácil y placentero empezar tu día.
Así que para levantarse temprano lleno de energía busca una serie de buenos pensamientos, incluso frases motivacionales, o imagina tus planes a futuro.
Recuerda fechas especiales o enfócate en tus objetivos de corto plazo; tener estas ideas en la mente te permitirá empezar tu día con el pie derecho.
5. Luego de tu pensamiento positivo, hidrata tu cuerpo:
Estos hábitos no solo buscan ayudarte a levantarse temprano sin sentirte cansado, sino que lleves un estilo de vida saludable y productivo.
Acabas de pasar más de 5 horas de sueño donde tu cuerpo no se ha hidratado.
Cuando te levantas y tomas un vaso de agua, no solo estarás hidratando tu cuerpo, sino que “encenderás” tu metabolismo, lo que te hará despertar más rápido.
Este es uno de los secretos de una mente y cuerpo joven.
Por último, no te acostumbres a tomar siempre café en las mañanas. Cuando lo haces parte de tu rutina tu cuerpo se suele acostumbrar y sus efectos se pierden.
El café debería ser tomado para disfrutarlo, no para mantenerte despierto.
6. Aférrate a una rutina de ejercicio:
Te levantaste de la cama, lograste despertarte lleno de entusiasmo y pensamientos positivos… ¿ahora qué?
En cuestión de minutos el sueño vuelve, las ganas de dormir y el sentimiento de que no fue suficiente regresan rápidamente…
La mejor manera de evitar esta situación es teniendo una rutina de ejercicio. Crea el hábito de levantarse temprano, desayunar e inmediatamente hacer algo de ejercicio.
Cuando haces ejercicio en la mañana, te recargas de energía, buenos pensamientos y adquieres un estilo de vida saludable.
Es por esto que Steve Jobs disfrutaba de tomar largas caminatas; el ejercicio en la mañana tiene múltiples beneficios, no solo en tu salud sino en tu trabajo.
En conclusión, si quieres aprender cómo levantarse temprano sin sentirte cansado, y lleno de energía para enfrentar un nuevo día, préstale atención a estos hábitos y a lo que haces desde que te levantas.