Propósito: el lenguaje invisible que le da sentido a tu existencia

 


¿Y si hoy fuera el último día de tu vida, vivirías igual?

No es una pregunta morbosa ni filosófica. Es, en esencia, una invitación a mirar hacia adentro. Porque muchas veces vivimos como si la vida nos debiera tiempo. Como si cada día fuera una sala de espera hacia un “algo” que no sabemos cuándo llegará. Pero, ¿y si lo más sagrado no estuviera allá afuera, sino justo aquí, en este instante? ¿Y si el propósito no fuera un destino, sino una forma de caminar?

He acompañado a cientos de personas y empresas en procesos de transformación desde 1988. Ingeniero de sistemas, administrador, mentor y pensador espiritual, sí. Pero, sobre todo, humano. Humano que también se ha sentido perdido, vacío, confundido. Por eso, no te hablo desde el pedestal del que cree tener todas las respuestas, sino desde el suelo fértil de quien ha hecho de las preguntas su templo. Porque el propósito, más que un logro, es un reencuentro. Un reencuentro contigo, con tu historia, con tu alma.

Recuerdo con nitidez el día en que comprendí esto de manera visceral. Fue en una consultoría con un empresario exitoso que, tras años de aparentar seguridad, se derrumbó frente a mí y me dijo: “Julio, tengo dinero, reconocimiento, una familia hermosa… y sin embargo siento que algo me falta. Me estoy muriendo en vida.” En su mirada no había locura. Había verdad. La verdad de alguien que ha confundido metas con sentido, productividad con plenitud. Y lo entendí: el propósito no siempre es visible. Pero cuando falta, se nota.

Desde entonces, he intentado vivir —no desde la inercia— sino desde la conciencia. Y eso ha cambiado todo. Porque vivir con propósito no es tener una lista de objetivos cumplidos, sino tener el corazón encendido incluso en medio del caos. Es encontrar sentido en el dolor, en la pausa, en la incertidumbre. Es abrazar tu humanidad como una obra en proceso, no como un producto terminado. Es entender que, aunque no todo salga como planeaste, cada paso puede estar alineado con lo que eres en esencia.

Cuando fundé Todo En Uno.Net en 1995 y más adelante la Organización Empresarial Todo En Uno en 2021, no lo hice por moda, dinero o status. Lo hice porque sentí un llamado. Un susurro del alma que me dijo: “Tu historia sirve. Tu camino puede abrir caminos.” Y he comprobado que las empresas con propósito no solo sobreviven más, sino que impactan más. Que los líderes con propósito no solo inspiran, sino que transforman. Que los equipos que vibran con un porqué, incluso en la adversidad, florecen.

He integrado en este camino herramientas como el Eneagrama, que me recuerda que mi tipo 1 necesita aprender a soltar la perfección para abrazar la gracia. La numerología, que me muestra que mi Camino de Vida 3 me invita a comunicar desde el alma. La inteligencia emocional, que me ha permitido comprender que mis emociones son brújulas, no enemigos. Y la inteligencia artificial, que me ha enseñado que la tecnología sin alma es solo ruido, pero cuando se alinea con el propósito humano, se vuelve milagro.

En el fondo, vivir con propósito no significa estar siempre motivado, ni tener todo claro. Significa no traicionarte. Significa ser fiel a lo que sientes, aunque cueste. Significa elegir lo que nutre tu alma por encima de lo que solo engorda tu ego. Y sí, significa aceptar que, en ocasiones, vivir con propósito implicará soltar seguridades, redefinir metas, reinventar caminos. Pero también te aseguro: nunca, nunca será una pérdida.

Hoy quiero decirte esto con total honestidad: si estás leyendo esto y sientes que has vivido en automático, no te juzgues. Todos, en algún momento, nos hemos perdido. Lo importante no es cuántas veces te hayas alejado de ti. Lo importante es que decidas volver. Volver a ti. Volver a tu centro. Volver a tu verdad.

Porque tu propósito no está escondido. Está en cada instante en que eliges amar en vez de odiar. Escuchar en vez de gritar. Servir en vez de imponer. Crear en vez de copiar. Tu propósito está vivo cada vez que tu corazón se conmueve, cada vez que tu conciencia se expande, cada vez que tu presencia transforma.

Y si aún no lo sientes claro, respira. Tal vez no necesites encontrar tu propósito, sino dejar que él te encuentre mientras vives con apertura, honestidad y sensibilidad. Porque a veces, el propósito no grita. A veces, el propósito susurra… y sólo lo escucha quien se atreve a silenciar el ruido del mundo.

Si sentiste que este mensaje te habló al alma, no lo dejes pasar. No se trata de cambiar tu vida de un día para otro, sino de empezar a vivirla con más presencia, con más sentido, con más amor. Si quieres conversar sobre tu camino, tus preguntas o simplemente deseas reencontrarte con lo esencial, te invito a agendar una charla conmigo. Será un encuentro de alma a alma, sin juicios, sin recetas. Solo escucha y propósito compartido.

Agendamiento:                     AQUÍ

Facebook:                              Julio Cesar Moreno D

Twitter:                                 Julio Cesar Moreno Duque

Linkedin:                               (28) JULIO CESAR MORENO DUQUE | LinkedIn

Youtube:                               JULIO CESAR MORENO DUQUE - YouTube

Comunidad de WhatsApp: Únete a nuestros grupos

Grupo de WhatsApp:          Unete a nuestro Grupo

Comunidad de Telegram:   Únete a nuestro canal  

Grupo de Telegram:            Unete a nuestro Grupo

Blogs:   BIENVENIDO A MI BLOG (juliocmd.blogspot.com)

AMIGO DE. Ese ser supremo en el cual crees y confias. (amigodeesegransersupremo.blogspot.com)

MENSAJES SABATINOS (escritossabatinos.blogspot.com)

👉 “¿Quieres más tips como este? Únete al grupo exclusivo de WhatsApp o Telegram”.

Recuerda: no estás aquí por casualidad. Estás aquí porque tu alma lo pidió. El propósito no se busca. Se vive. Se siente. Se honra. Y yo estaré encantado de acompañarte en ese despertar.

Julio Cesar Moreno Duque

soy lector, escritor, analista, evaluador y mucho mas. todo con el fin de aprender, conocer para poder aplicar a mi vida personal, familiar y ayudarle a las personas que de una u otra forma se acercan a mi.

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente