El Buen Ahora: el tiempo sagrado donde todo comienza

¿Y si no necesitas más que este instante? ¿Y si la plenitud no estuviera en el futuro ni en el pasado, sino aquí, ahora mismo, en tu respiración, en tu cuerpo, en tu conciencia despierta?

Te hago esta pregunta no desde la teoría, sino desde la experiencia. Porque yo también estuve allí: atrapado en la trampa del "cuando logre esto", "cuando termine esto otro", "cuando crezca el negocio", "cuando me jubilen", "cuando mis hijos estén bien", "cuando me sienta listo". Hasta que comprendí que ese “cuando” no existe. Existe el ahora.

Y en este ahora, lo único verdaderamente real, nos jugamos la vida entera.

Daniel Colombo lo expresa con maestría en su texto “Felicidades: ¿qué es el buen ahora?”, al introducir una técnica sencilla pero profunda para reconectarnos con lo esencial: el presente como un espacio de poder, consciencia y serenidad. No como una moda espiritual ni una pose estética, sino como una decisión radical: estar aquí. Ser aquí. Vivir aquí. Y eso, créeme, lo cambia todo.

Desde que fundé Todo En Uno.Net en 1995 y más tarde la Organización Empresarial Todo En Uno.Net, he acompañado a empresarios, líderes y equipos enteros a redirigir sus empresas, pero más aún, sus existencias. Y he confirmado algo con certeza: las decisiones más transformadoras no se toman en medio del ruido, sino en la pausa. En el silencio. En el ahora.

Porque no somos máquinas diseñadas para correr sin parar, somos organismos vivos que solo florecen cuando están presentes. Y en este tiempo tan saturado de exigencias, datos, metas y “likes”, la verdadera revolución es la atención plena. No la atención productiva. La atención amorosa.

En uno de mis retiros, un empresario me dijo con los ojos vidriosos:

“Yo tenía todo para ser feliz... excepto tiempo para sentirlo”.

Esa frase me atravesó. Porque muchas veces vivimos acumulando cosas, personas, títulos y logros... sin presencia.

¿Y de qué sirve tener una casa hermosa si no la habitas conscientemente? ¿Un negocio exitoso si tu mente nunca se detiene? ¿Una pareja maravillosa si estás ausente en cuerpo o en mente?

Aquí entra el “Buen Ahora” como una práctica vital, casi revolucionaria.

No se trata solo de respirar lento. Se trata de despertar.

De ver lo que antes ignorabas. De sentir lo que evitabas. De habitarte con respeto, humildad y gratitud. De darte cuenta que tú ya estás completo, y que todo lo que anhelas comienza aquí: en tu conciencia presente.

Y es que, como bien dice el maestro Eckhart Tolle:

“Donde estés, está el ahora. Y el ahora es tu vida”.

Muchos me preguntan:

—“¿Pero cómo estar presente cuando tengo mil cosas que hacer?”

Y mi respuesta es:

—“Estando en lo que haces. No huyendo de lo que haces. No juzgando lo que haces. Sino honrando lo que haces.”

No importa si estás lavando los platos, liderando una junta o resolviendo un conflicto familiar. Tu atención lo transforma todo.

Tu presencia convierte cada momento en un altar. Y allí mismo, aparece la paz.

Y cuando eso ocurre, ocurre también la magia: tu productividad mejora, tus vínculos se humanizan, tu estrés baja y tu energía se renueva. Porque el Buen Ahora no te quita tiempo, te lo devuelve. Te regala la eternidad contenida en cada minuto.

Yo mismo aplico esta práctica cada mañana desde hace años. Antes de revisar mi agenda, correos o proyectos, me doy 5 minutos de presencia sagrada. A veces en silencio, a veces orando, a veces respirando. Pero siempre escuchando lo que tengo dentro. Y desde allí, decido cómo actuar.

Ese pequeño ritual cambió mi vida.

Porque cuando estoy presente, dejo de reaccionar y empiezo a responder.

Dejo de correr y empiezo a fluir.

Dejo de temer y empiezo a confiar.

Y eso, amigo lector, cambia empresas. Cambia culturas. Cambia el mundo.

Hoy más que nunca, la humanidad necesita presencia. Porque estamos saturados de información, pero sedientos de sabiduría.

Estamos conectados digitalmente, pero desconectados de nosotros mismos.

Y entonces, me pregunto con humildad:

¿Qué pasaría si enseñáramos a nuestros niños, jóvenes y empresarios a vivir en el Buen Ahora?
¿Qué pasaría si hicieras de tu vida una ceremonia de atención amorosa, instante por instante?

Seguramente no necesitarías correr tanto para “llegar”, porque te darías cuenta de que ya estás.

“Por siglos creímos que el milagro de pensar, crear y decidir era únicamente humano.
Hoy, una creación nuestra, la Inteligencia Artificial, irrumpe no para sustituirnos, sino para desafiarnos a evolucionar.
El paradigma se rompe, y con él, la zona de confort en la que nos refugiamos.
Ya no basta con pensar, hay que replantear qué es la inteligencia, qué es la conciencia y cuál es nuestro verdadero rol como especie.
¿Estamos preparados para coexistir con una inteligencia no biológica que aprende, decide y, en ocasiones, acierta más que nosotros?”
— Julio César Moreno Duque

Y sí, la IA ya nos acompaña. Pero ¿de qué sirve tener inteligencia artificial si no cultivamos conciencia natural?

¿De qué sirve la automatización si no sabemos detenernos a mirar una flor, un gesto, una lágrima o un suspiro?

Estamos a tiempo. Todavía. El Buen Ahora siempre está disponible.

Solo basta decirle sí.