Antes que ocultarlas, la cosmética apuesta por ellas como canon de belleza.
Ahora, las pecas son sinónimo de naturalidad, juventud y diversión y, ¿por qué no?, también de rebeldía. Algunas personas las consideran incluso sexis y seductoras.
Pero en cuestión de pecas no hay término medio: si se tienen, se odian. Si no se tienen, se desean. Ahora viven un momento dulce y rinden un homenaje a la década de los 60 del pasado siglo.
Desde que el fotógrafo Brock Elbank –conocido como Mr. Elbank– decidiera exhibir en la redes sociales la singular belleza de las pecas, el mundo de la cosmética y de la moda se ha rendido a este signo de juventud y frescura y las ha convertido en tendencia.
Ya no es necesario camuflarlas tras una base de maquillaje, ahora se impone lucirlas en todo su esplendor. Es más, algunas se atreven a exhibirlas de manera artificial, como la maquilladora Gucci Wetsman, quien las recrea sobre la base de maquillaje perfeccionando el acabado 'no make up' en el rostro.
Son muchas famosas las que se siente orgullosas de su pecas e incluso exigen que no se las tapen con ningún retoque fotográfico. Gisele Bündchen, Emma Watson, Julianne Moore o Emma Stone han conseguido que sus pecas sean un rasgo muy distintivo de su imagen, parte de su sello personal.
Si no las tienes, dibújalas
Las pecas son hereditarias y más comunes en pieles claras. También pueden proliferar por una larga exposición al sol, pero si no las tiene naturales las puede pintar, la cosmética apuesta por ellas como canon de belleza. Por eso, la asesora de belleza de la firma Topshop Hannay Murray ideó el lápiz Freckles Pencil con dos pigmentos, una herramienta para dibujar pecas sobre nariz y mejillas.
Murray explica que las personas con el rostro más redondo deben “colorear pecas en aquellas zonas de la cara donde les da el sol, comenzando por el puente nasal, donde las pecas serán más densas, y continuando por ambos lados de la nariz hasta las mejillas, donde estarán más dispersas”.
Para aquellas que tengan el óvalo facial en forma de corazón, lo ideal es dibujarlas “con un toque leve, en la parte de arriba de la nariz y a través de las mejillas”.
Para la maquilladora Charo Palomo, directora de Atelier Charo Palomo, las pecas tienen un punto ‘rebelde’, y sobre los rostros ovalados “resultan divertidas”, pero se deben dibujar “en dos tonos de marrón para conseguir un resultado natural”.
Otro método más sofisticado es el que propone la marca Freak Yourself: se trata de un kit compuesto por 72 plantillas autoadhesivas acompañadas de una fórmula autobronceadora que ofrece resultados naturales que duran 48 horas.
Un trazo sexi
Se trata de un punto fácil de dibujar con un lápiz negro o marrón, que realza la belleza y proyecta seducción. Esa marca también es un símbolo sensual; basta mirar los rostros de Cindy Crawford, Angelina Jolie, Scarlett Johansson, Natalie Portman o Madonna.
Los lunares en el rostro son todo un fetiche erótico. Tanto, que grandes íconos de la belleza como Marilyn Monroe o Dita Von Teese, al no tener ninguno natural, se los han pintado.
Pero no solo es símbolo erótico en la mujer, también resulta muy atractivo en hombres, si se recuerda a Robert de Niro y a Enrique Iglesias, entre otros.
Si tiene uno o varios lunares en el rostro, no los oculte; presuma de ellos.