En Colombia, apenas 250.000 personas están afiliadas a un plan complementario de salud, un servicio tan efectivo como la medicina prepagada, pero a un costo menor.
Tener un buen servicio de salud es algo que preocupa a toda la ciudadanía. Para los trabajadores formales la primera opción es la afiliación a una EPS, pero este servicio es deficiente, debido a la cantidad de pacientes que sobrecargan el sistema: cualquier cita la asignan para dos meses después de la urgencia; no hay especialistas disponibles; hay drogas que debería entregar el POS, pero en la mayoría de los casos no hay inventarios y el afiliado debe adquirirlas por su cuenta. Estos, entre otros muchos, son los problemas diarios de quienes están afiliados a una EPS.
En el otro extremo está la medicina prepagada, pero sus tarifas altas hacen que sea un servicio aspiracional al que pueden acceder pocos trabajadores en Colombia. Eso sí, el buen servicio y la atención están garantizados, aunque como se dijo es un privilegio de pocos.
Ni tan allá ni tan acá, existe otra opción de servicio médico al que podrían acceder más colombianos: se trata de los planes complemetarios de salud.
La Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi) asegura que hay cerca de 250.000 colombianos afiliados a los planes complementarios y alrededor de un millón a medicina prepagada.
De quienes cuentan con este tipo de planes, Compensar tiene una participación del 64 %. La entidad cuenta que de ese porcentaje 54 % son mujeres y un 48 % son hombres.
¿QUÉ ES UN PLAN COMPLEMENTARIO?
Estos planes son una modalidad de contratación individual o colectiva que brinda ventajas de acceso a una red de atención diferencial, con mayor cobertura y beneficios, mejorando los servicios del Plan Obligatorio de Salud.
Por uno de estos planes se puede pagar desde $36.000 hasta $180.000, mientras que una prepagada puede acanzar los $350.000, según datos de Famisanar.
Sin embargo, no es el único plan voluntario de salud. Además de las prepagadas, existen pólizas de seguros emitidas por compañías vigiladas por la Superintendencia Financiera y otras opciones ofrecidas que deben estar bajo el control de esta entidad.
¿QUÉ LO DIFERENCIA DE LA PREPAGADA?
Su diferencia con la medicina prepagada no solo radica en los precios sino en quienes prestan este servicio. La ley establece que quienes ofrecen esta posibilidad deben ser entidades de medicina integral, mientas que los planes complementarios pueden ser prestados solo por las EPS.
Fanny Cañón, gerente comercial de Compensar, asegura que también se pueden encontrar diferencias en la forma en que se atiende.
Cañón cuenta que en el plan complementario que ofrece la entidad los pacientes primero pasan a consulta con un internista y luego se remiten a los especialistas, mientras que este proceder no es usual en las prepagadas.
Otro factor que distancia a estas dos modalidades es el sistema de pago. En los planes complementarios no se utilizan bonos; en medicina prepagada, sí. La gerente comercial de Compensar añade que, incluso, en algunos servicios que incluyen los planes no aplica un pago.
BENEFICIOS
Aunque estos ‘plus’ varían conforme al tipo de planes que se adquieran y la entidad que los preste, normalmente los afiliados cuentan con una red de profesionales especializados en áreas como la optometría y la psicología, una atención más ágil, citas adecuadas a sus tiempos, consultas médicas domiciliarias, habitaciones privadas en las clínicas en que se internen y una atención preferencial a las madres gestantes.
Pero también hay que tener en cuenta lo que estos planes no incluyen. Cañón aclara que estos programas no se hacen responsables por enfermedades preexistentes.
Estos planes tampoco contemplan, entre otras cosas, trasplantes de órganos, accidentes bajo los efectos del alcohol o las drogas, ni cirugías estéticas.
¿Por qué acudir a un plan complementario de salud si existen las prepagadas? Francy responde contundente: le brinda la oportunidad a muchos colombianos que no pueden pagar una prepaga de tener derecho a beneficios que no incluye el POS, a un trato preferencial.
¿ESTÁ BUSCANDO UN PLAN?
Famisanar destaca varios puntos que debe evaluar si usted quiere afiliarse a esta opción. Uno de ellos es revisar la cobertura del plan que va a adquirir para que, en determinadas eventualidades, usted esté en capacidad de reclamar sabiendo de ante mano a qué tiene derecho.
En este aspecto es importante que también le preste atención a los insumos y la red de profesionales y clínicas con los que cuenta el plan. ¿Sabe si el programa que le están ofreciendo cuenta con planes de prevención o si contempla servicios especiales para pacientes con discapacidades?, por ejemplo.
Otro factor a tener en cuenta es qué tantas comodidades le ofrece la entidad con la que se está afiliando.
Aunque parezcan detalles pequeños, en su momento agradecerá que pueda diligenciar autorizaciones online, que la EPS cuente con aplicativos móviles, que contemple atenderlo en casa o que le ofrezca una línea de orientación médica las 24 horas.
La entidad también llama a reflexionar sobre qué está priorizando ¿calidad o precio? “Valore la confianza que le brinda la marca de la empresa. Existen diferencias importantes en el mercado de la salud, hay productos con mayor cobertura a la mitad del precio. Lo importante es que nosotros y nuestras familias nos encontremos respaldados y acompañados siempre”, puntualiza Famisanar.